La forma como nos persibimos a nosotros mismo
influye en el trato hacia y de los demás
¿Cómo me veo? ¿Es importante la forma en cómo me percibo a mi mism@? ¿Influye esto en mi relación con los demás? Dependiendo de la respuesta a la primera pregunta; vienen de forma invariable las otras dos: si y si. La auto percepción es la forma “como nos percibimos, o sea, como nos vemos personalmente y como parte del entorno social”. Es importante el cómo te ves a ti mismo. La forma depende del nivel de autoestima y valoración que poseas. Vivimos en una sociedad en la que se ha “pintado como algo malo el amarse y elogiarse a uno mismo”. Se lo ve como cosa de arrogantes y vanidosos. ¡Eso es mentira!Erich Fromm, psicólogo y escritor, bien cito “sino me amo, ¿Quién lo hará?; sino me respeto; ¿Quién me respetara?”. Lo que recibimos es el resultado de lo que damos. Las personas nos verán y trataran de acuerdo a como lo hagamos con nosotros mismos. No es cosa de poner “mascaras” para aparentar nuestras bajas estimas. El asunto es reparar esas grietas personales que nos llevan a la misma. Cuando te levantes piensa en las cosas buenas que Dios ha hecho para ti. Siéntete agradecid@. Mírate al espejo y convéncete de que eres unic@ e irrepetible. Valora los dones y talentos que se te han dado y úsalos al máximo. Acepta un elogio a tu persona o a lo que has hecho con un gracias acompañado de una sonrisa. Si te dicen “estas bella”, di “gracias a Dios, y para el gusto de tus ojos” jajajaja. Aprende a confiar en ti mismo. Me he fijado que los mediocres son quienes buscan descalificarte en lo que a potencialidades se refiere. Es que quieren mantenerte en su nivel.Mirémonos como parte de un conjunto, pero con forma diferente al mismo. Ser parte de una sociedad, comunidad o equipo no significa que seamos uniformes al mismo. Mi diferencia de pensar, ser y hacer es la que enriquece al otro como lo mismo me enriquece a mí. ¿Cómo te ves? La respuesta está en ti.