Pocos días quedan para finalizar este año fiscal, pero aún tenemos algún margen de reacción si queremos disminuir en alguna medida nuestra factura fiscal. Esto es lo que comúnmente se denomina “planificación fiscal”, algo que tenemos a nuestro alcance y muchos de nosotros no ponemos en práctica.
El ejercicio de esta herramienta ya pueden llevarla a cabo, no sólo los grandes despachos de la asesoría fiscal, sino también cualquier pequeño despacho, o incluso cualquier ciudadano a título particular o empresarial.
Para ello, basta con utilizar el nuevo simulador de la declaración de IRPF 2012 que ha publicado en su web la Agencia Tibutaria, y sobre cuyas características y funcionamiento he escrito recientemente un artículo en ConTunegocio, uno de los blogs en los que suelo escribir, y que como viene siendo costumbre, os enlazo desde este blog y os invito a leer pulsando sobre la siguiente imagen:
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