Si llegada la hora de la merienda nuestros hijos se encuentran solos en casa o simplemente tienen la libertad de atacar el refrigerador cuando lo desean, pueden llenarse con opciones poco saludables y arruinar su apetito por las comidas regulares. Por esta razón, es importante tomar control de las elecciones de aperitivos disponibles, la cantidad que vamos a servirles y cuando se los vamos a ofrecer.
Alguno de los pasos que podéis tener en cuenta a la hora de planificar las meriendas de la semana son las siguientes:
- Prestar atención a la pirámide de alimentos es fundamental para asegurarnos de que proporcionamos a nuestros hijos los grupos de alimentos necesarios. Se deben equilibrar los carbohidratos, las proteínas y las grasas.
- La participación de los niños en el proceso de preparación de bocadillos saludables es una muy buena opción a la hora de enseñarles qué significa tener una buena alimentación. “Vamos a elegir bocadillos en la tienda de comestibles”: esta es una gran lección que enseña a nuestros hijos a tomar decisiones saludables y a ser independiente
- Preparar bocadillos saludables fácilmente accesibles y convenientes agiliza la merienda diaria: los aperitivos pueden incluir frutas como plátanos, manzanas y uvas. También se puede preparar bocadillos de antemano, por ejemplo cortando zanahorias o apios y combinándolos con queso o jamón
- Limitar los aperitivos no saludables como las patatas fritas o los refrescos, o aún mejor abstenerse de comprarlos. Si vuestro hijo está acostumbrado a estos snacks, es mejor no cortarlos por completo, sino ir haciéndolo de manera gradual
- Añadir variedad ofreciendo aperitivos diferentes todos los días es la mejor opción para que nuestros niños se sientan motivados y felices a la hora de la merienda. Podéis crear un ciclo de 3 semanas para saber de antemano qué comprar y servir. Cuando un día puedes ofrecer el queso con uvas, otro puedes servir galletas con mantequilla de maní. Otras sugerencias incluyen zanahorias con hummus, bocadillo mezclado con pasas, nueces y cereales, el plátano cortado con yogur bajo en grasa y galletas con nutella
- La diversión no debe faltar: Cortad las verduras en formas divertidas, los sándwiches con cortadores de galletas, servid las frutas cortadas en los pinchos de brocheta u organiza meriendas con una cara graciosa. Estos consejos harán divertido el comer más saludable
- Acompañar a los niños a la hora del refrigerio no sólo es un excelente momento para vincularse con nuestros hijos, es la oportunidad de practicar lo que predicas. Se puede mostrar a nuestros hijos que comer bocadillos saludables es una forma de vida
- No tener miedo de enseñar a nuestro hijo a merendar: Los nutricionistas recomiendan a menudo comer cinco veces al día con una merienda entre el desayuno y el almuerzo y otra merienda entre el almuerzo y la cena. Con esto en mente, las porciones para el desayuno, el almuerzo y la cena deben ser más pequeñas.
¡Esperamos que os hayan gustado estos consejos y que aprovechéis ese tiempito con vuestros niños!
http://carritus.wordpress.com/2011/08/25/%C2%BFcomo-preparar-meriendas-ricas-y-divertidas-a-nuestros-hijos/