- Evitar el reposo (salvo que sea necesario por motivos médicos).
- Cumplir las normas de higiene postural.
- Hacer ejercicios para entrenar y fortalecer los músculos cuyo funcionamiento depende la espalda.
- Las fajas pélvicas ( colocadas alrededor de las caderas) pueden usarse durante el embarazo o después del parto, cuando el dolor se deba a la afectación de la articulación posterior de la pelvis.