¿Quieres saber cómo puedes ahorrar dinero? En este artículo te damos una serie de consejos para el ahorro en el caso de cobrar el salario mínimo.
Un total 1.080 euros al mes en 14 pagas o 15.120 euros anuales brutos. Ese es el Salario Mínimo Interprofesional en España (SMI), al que después hay que restarle retenciones de IRPF y cotizaciones sociales. Ahorrar cuando cobras 1.000 euros al mes es todo un reto, pero no uno imposible.
La diferencia entre ahorrar dinero con pocos ingresos a hacerlo con el salario medio, es que en el segundo caso el porcentaje de ahorro debería ser mayor. Como mileurista habrá que hacer algunos ajustes más.
¿Cómo ahorrar dinero?: algunos consejos
Estos 10 consejos prácticos te ayudarán a enfocar ese esfuerzo y ahorrar aunque cobres el salario mínimo.
Ahorrar implica hacer un esfuerzo y privarse de algo, tanto si ganas 1.000 euros como si ganas 5.000 euros.
La solución pasa por ahorrar a principio de mes y hacerlo de forma automática. Así eliminas tu fuerza de voluntad de la ecuación. Esto es lo que se conoce como preahorro.
Para empezar a preahorrar solo necesitas decidir el porcentaje de tu salario que quieres ahorrar y crear una orden de transferencia automática en el banco de la cuenta donde recibes la nómina a una cuenta separada.
Si no estás acostumbrado a ahorrar porque cobras poco, empieza con un porcentaje pequeño como un 5% de tu salario. Para una persona que cobra el salario mínimo puede ser 50 euros al mes. A partir de ahí se puede ir aumentando la cantidad poco a poco hasta donde uno pueda o quiera.
Un error muy habitual al ahorrar es centrarse en recortar los gastos en hábitos que queremos cambiar o en cosas que identificamos como caprichos. Esta forma de enfocar el ahorro supone un esfuerzo adicional.
En resumen, busca gastos que no te aporten valor en tu vida y que, además, sea fácil de eliminar o con los que el ahorro sea duradero, como puede ser la factura de la luz.
Fácil decirlo, aunque no tanto conseguirlo. Desde el supermercado hasta las páginas web pasando por las tiendas, todas usan trucos para que compres por impulso y que hacen que sea más difícil ahorrar como mileurista.
Hay muchos trucos para combatir este tipo de compras, pero uno de los más efectivos es pensar cuántas horas de trabajo necesitas emplear para comprarlo. Solo el hecho de pararte a hacer el cálculo hará maravillas. Si te supone mucho esfuerzo, prueba a buscar una alternativa más barata en el momento.
La clave en ambos casos es distanciar el momento del impulso de compra de cuando tomas la decisión final de comprar.
La vivienda es uno de los principales gastos, especialmente en las grandes ciudades. La diferencia entre vivir en el barrio del Retiro en Madrid o hacerlo en el distrito de Fuencarral es de 330 euros para una casa de 85 metros cuadrados según datos de Idealista.
Esta diferencia es todavía mayor si hablamos de ciudades periféricas o pueblos de las afueras. Adaptar la vivienda a tu presupuesto es una forma de ahorrar dinero con ingresos limitados.
Los gastos fijos son los mayores enemigos del ahorro. Revisarlos puede ayudarte a cuadrar el presupuesto y ahorrar todos los meses. Desde seguros hasta subscripciones.
Es decir, suspende durante un mes esa subscripción concreta y al cabo de ese tiempo valora si la has echado tanto de menos como pensabas.
Las subscripciones son uno de los llamados gastos hormiga, pequeños gastos que de forma individual no supone un gran desembolso, pero que juntos sí pueden hacerlo.El café del medio día, comisiones que pagas por la tarjeta de crédito, pequeños vicios... Haz números y utiliza el truco de las compras compulsivas para evitarlos.
Un método que funciona es la regla 50-30-20 es una fórmula para distribuir los ingresos. Básicamente divide la nómina de la siguiente forma:
- 50% para necesidades esenciales.
- 30% para caprichos y gastos no esenciales.
- 20% para el ahorro o inversiones.
Con esta fórmula ahorrarás siempre el mismo porcentaje de tus ingresos, cobres lo que cobres. Así evitarás gastar más cuando ganes más dinero.