COMO SER LO QUE TU QUIERAS: Hábitos saludables para obtener el éxito

Estoy convencido en la adquisición de hábitos saludables para obtener el éxito y llegar a encontrar la felicidad. Una felicidad que provoca satisfacción y estabilidad en cada uno de nosotros y que de una manera u otra nos llena.

Recuerdo mi época de lector de biografías. Todavía conservo una idea general de todas y aquellas personas que manifestaban que habían conseguido el éxito personal y la satisfacción propia. Todas tenían en común varias cosas: eran personas que habían mantenido e implementado hábitos saludables en su vida y se habían marcado nuevos retos.

Como bien dice a la pregunta de Pilar Jericó: “¿Se puede ser feliz pase lo que pase en la vida?”, Ana María Cobano manifiesta:

“Sí. Luchando día a día, aceptándote como eres, marcándote nuevos retos y creyendo en uno mismo”

Y es que la vida realmente cuando lo piensas es realmente eso, lucha. Lucha al aceptar como eres, lucha en creer en ti… en definitiva luchar contigo mismo minuto a minuto a través de ti, de tus hábitos, de tus retos. En la vida soy de esas personas que piensan que debemos de probar, experimentar y divertirnos, pero de verdad que no hay mejor manera de alcanzar la felicidad que planteándote nuevos retos en tu día a día.

Algunos hábitos saludables

Los buenos hábitos, bien desarrollados duran toda la vida. Planifica tu vida con las lista de hábitos que te indico abajo. Mira los que tienes implementados, grabados, y observa los que quieres llegar a implementar.

No te creas eso que escriben algunos en Internet intentando vender cursos de Desarrollo Personal forjando el mito y la creencia de que un buen hábito tan solo se tardan de tres a cinco semanas en quedar forjados y afianzados. Si bien es cierto -como más abajo te cuento- que te debes de “conceder tiempo” para convencerte a ti mismo que vas por el camino adecuado, hace falta mucho más tiempo para consolidar un hábito que quieras establecer y afianzarlo fijamente, en una palabra: que puedas manifestar que forma parte de tu vida.

“Somos lo que hacemos repetidamente”

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Y el objetivo no es otro que cambiar un estilo de vida que conduce a llevar una vida mucho mejor.

Aunque en la definición de hábitos en Wikipedia observamos una mención especial a aquellos malos hábitos que nos rodean junto con los hábitos y la consecución de metas, voy a pasar a desarrollar algunos que, a mi personalmente, me van servir junto con otros para desarrollarlos de forma continua.

Estos son los hábitos que voy a comenzar a trabajar:

# Tener un horario estable

Y esto es posible aún trabajando a turnos. Tener un horario es vivir el día. Ayuda a estructurar mucho mejor la rutina diaria y hacemos lo que nuestro cuerpo espera de nosotros. Comer, dormir y en definitiva vivir sobre el mismo plano horario el día a día.

Del todo queda asumido que afianzar un hábito y que forme parte de la personalidad del individuo depende no solo de la persona, si no también de otros factores sociabilizadores y ambientales, por tanto desecho en mi lectura libros que tienen por título “21 días para…” o aquellos que te suman al título “…consíguelo en solo 4 semanas”

# Comer de manera saludable

Dentro de los hábitos saludables para obtener el éxito no podía falta aprender a comer de forma sana. Ver lo que nos conviene y lo que no nos conviene.

# Hacer ejercicio

Hace tiempo que no hago nada de ejercicio. Voy pronto a comenzar a andar. Tan solo andaré como ejercicio inicial.

El ejercicio además de saludable puede llegar a ser adictivo. El desarrollo de un hábito como el ejercicio incrementa la cantidad y la calidad de vida. No hay mejor manera de ejemplificar los hábitos saludables para obtener el éxito que la demostración de la superación, esfuerzo y lucha que nos da el mundo del deporte.

# No rendirse nunca

No rendirse es creer en uno mismo. Se necesita perseverancia en la vida para conseguir el éxito, y la mayoría de las cosas cotidianas que nos rodean y nos envuelven están llenas de pequeños éxitos. Si paramos, nunca llegaremos al final y estaremos rendidos. La perseverancia es un hábito que puede ser desarrollado como cualquier otro.

Recuerdo esta frase que no se donde la escuché…

“Cuando las cosas se ponen duras, los duros se ponen en marcha”

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# Practicar la gratitud

La gratitud conlleva entrenamiento. Generalmente las personas que desarrollan mucha gratitud suelen ser personas felices.

# Ser un lector habitual

Leer requiere su práctica. Cuanto más lees, mejor lo haces. Cuanto mejor lo haces, mejor escribes; y cuanto mejor escribes, más sabes.

# Luchar por la excelencia

Debemos de emplear todos nuestros esfuerzos en realizar las cosas bien, dar el mejor y el mayor de nuestros esfuerzos. Realizar las cosas hasta el punto en que una vez terminadas, nos sintamos orgullosos de nuestro esfuerzo. La excelencia en la realización de las cosas no es un acto, es un hábito.

Implementar los hábitos

El objetivo de consolidar un hábito no es otro que crear cambios de comportamiento de larga duración para dirigirnos poco a poco a grandes metas.

# Con motivación

La motivación para conseguir esas metas y perpetuar el hábito es un factor básico, aunque muchos de nosotros tendemos al problema de sentirnos verdaderamente intimidados por metas elevadas y de difícil consecución. El logro de ello es una cosa que depende de nosotros, y nosotros muchas veces somos débiles.

Un truco aquí es diferenciar lo que podíamos llamar “objetivo general” y “micro objetivos”. El objetivo general es la visualización mental que nos hacemos a nosotros mismos del target u objetivo básico que desearíamos lograr algún día, y los micro objetivos son las pequeñas cuotas o asignaturas que debemos ir aprobando en el duro camino hasta llegar a implementar el hábito en nuestra personalidad.

A la hora de dejar de fumar, muchísima gente visualiza el día a día. No se hace planteamientos de futuro o lejanos. Dejar de fumar HOY, nada más. Sin pensar en el mañana u otro día. Plantearte si eres fumador que “durante toda tu vida te vas a privar del tabaco” (objetivo general) puede ser una ardua tarea sin no consolidas paso a paso la obtención de pequeñas metas o cuotas que tan solo vas a conseguir si consigues dejar de fumar un solo día (micro objetivo).

La motivación hay que mantenerla en el tiempo. Con la aparición de los problemas y los inconvenientes se vuelve muy difícil mantenerse constante. Las visualizaciones positivas de que vamos por buen camino y de que vamos a conseguir nuestro propósito, es un aspecto muy motivador y nos empuja a nosotros mismo para seguir hacia adelante.

# Con planificación

La planificación consiste en visualizar el proceso y de esta manera ayudar a centrar la atención en los pasos necesarios para llegar a la meta. A base de visualizar los micro objetivos solo conseguiremos llegar al objetivo general.

Se deben de crear eslabones mentales en la cadena de nuestros pensamientos a modo de nexos de unión con el nuevo hábito. Por ejemplo, en lugar de pensar “hoy voy a comer sano” o “hoy no voy a comer carne”, una idea sería comenzar a buscar un plato saludable y sano para cada día en Internet a base de verduras que nos “entre por los ojos” e imaginar los bueno que tiene que estar ese plato una vez lo cocinemos.

En la planificación debemos de observar otro aspecto importante, y es ese momento en el que podemos llegar a decir: “Al carajo todo esto… ¡No vale la pena esforzarse!” y si, vale la pena, y mucho. Créeme. Debemos de tener preparada una respuesta mental para ese momento y ese ambiente. Si nos hemos propuesto comenzar a hacer ejercicio, el llegar de trabajar y ponerse a andar cinco kilómetros o salir a correr no siempre va a ser un “plato de buen gusto“. Debemos de tener una idea preparada para esos momentos de falta de ánimo y de fatiga donde la motivación comienza a flaquear y a disminuir.

Pensar en la ducha de agua caliente después de terminar de correr, visualizar la satisfacción personal que sentimos ese día al haber conseguido nuestro objetivo o lo bien que se duerme ese día si corres cuando llegas de correr, nos hace pensar positivamente y cambiar de pensamiento incluso cuando no lo deseas. Hay que saber que los momentos de negatividad son los momentos que pueden dar al traste con la consecución de nuestro objetivo.

Conseguir hábitos saludables para obtener el éxito

Una de las cosas que yo procuro es NO “reinventarme” a mi mismo. Debes de aceptarte como eres y lo único que buscas es “afinar” el contenido. Uno de los motivos del fracaso en todo lo que nos proponemos a nosotros mismos para el Año Nuevo a finales de cada año, es debido a que nos reinventamos un nuevo YO que no concuerda efectivamente con la persona que somos. Si nuestro objetivo era asentar hábitos saludables para obtener la felicidad, debemos de tener conciencia de quienes somos y lo que nos mueve a hacer o no hacer según que tipo de cosas.

A todo el mundo le cuesta trabajo conseguir y alcanzar un cambio en sus costumbres. No debes de desanimarte. Muchos grandes escritores que leí lucharon toda su vida por una ética en su trabajo a lo largo de toda su carrera, y eran grandes escritores.

Una de las maneras de conseguir la felicidad es sin duda la satisfacción personal del trabajo bien hecho, de lo que yo llamo el éxito personal a través de conseguir metas impuestas. Metas personales.

Si una cosa no funciona, hay que cambiarla:

“Si haces lo que siempre has hecho, obtendrás lo que siempre has conseguido”

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Elementos que me pueden ayudar a conseguir el éxito por sumar un hábito saludable a mi vida:

1. Mi éxito personal a través del trabajo y el esfuerzo sobre mi persona.
2. Yo soy el “jefe” de mi vida y soy el que va escribiendo el guión.
3. Salud mental y conocimiento, sabiendo hasta donde puedo llegar.
4. Satisfacción del cumplimiento de mis metas.
5. Tener mayor facilidad para “dar saltos” y hacer realmente con mi vida lo que quiero (quien puede lo más, puede lo menos).
6. Darle un sentido a mi vida.

y… ¿Cómo se consigue todo esto?

Si has estado leyendo todo el post hasta aquí -cosa que me alegra mucho- vas a leer que para todo ello y lo descrito anteriormente utilizo una serie de “trampas mentales” y algunas, bien descritas (lo intentaré) pueden llegar a parecer que lo que estoy haciendo es relativamente fácil, aunque siempre busco cargarlo de una tremenda coherencia.

# Dedicándome a crear hábitos saludables.

“Abandonar los malos hábitos nos cuesta mucho trabajo, siendo mucho más fácil crear hábitos saludables que creen conexiones y se fijen sobre el anterior“

Charles Duhigg

Es por ello que normalmente para una persona que hace deporte es mucho más fácil dejar de fumar que para otra que no lo hace. Si habitualmente sales a correr y te haces varios kilómetros, difícilmente acabes tus días fumando. Dentro de tus hábitos saludables para obtener el éxito, podrás acabar como deportista o como gran fumador, uno de dos.

# El impresionante poder que tengo para “ponerme las cosas fáciles”.

Recuerdo cuando estudié en la universidad que me costaba un trabajo enorme repasar la noche antes del examen. Si bien me había dado cuenta que cuando repasaba mis resultados eran mucho mejores, aún así me costaba la misma vida ponerme a repasar y acostarme un poco más tarde. Prefería olvidarme un poco del examen y pensar que “todo el trabajo estaba hecho”. Aún siendo conocedor del buen resultado que tenía repasar los apuntes me “auto-engañaba a mi mismo“. Solución: Me llevaba los apuntes y los metía dentro de la cama. Una vez dentro de la cama, ya no tenía “mas remedio” que ponerme a repasar y no quedarme dormido hasta llegar a las últimas hojas. Mejoré los resultados cada vez que lo hice.

Aquí ahora y a modo de ejemplo, creo que es mejor pensar en “comer de forma saludable” o fijarse una meta diaria de hacer al menos una comida a base de verduras que pensar en “ponerme a régimen” y soportar una dieta.

# Siendo tremendamente constante y aburrido.

Cuando se trata de formar hábitos, la mayoría de los beneficios se obtienen con las repeticiones. Como si de un músculo se tratara, el cerebro con las repeticiones de ejercicios se fortalece.

Para practicar y aprender algo, es mejor cinco minutos al día que una hora a la semana. La constancia y la perseverancia obligan al cerebro a acostumbrarse y a “ponerse al día a día“.

# Tratando de habituarme.

Evaluar la conducta mentalmente cada día para tampoco convertirme en comportamientos automáticos, más bien no dejarme llevar y comprobar si mi comportamiento es cercano a conseguir el objetivo que me he propuesto.

# Concediéndole a un nuevo hábito un mínimo de ocho semanas.

Numerosos estudios coinciden en que por ejemplo la práctica de la meditación de 30 minutos al día crea cambios duraderos en el cerebro tras una práctica continuada de ocho semanas.

 # Para aprender más sobre algo, enséñalo.

Si consigo hacer algún progreso o aprendo algo basado en mi propia experiencia personal, no dudaré en contarlo y decir como lo he conseguido, o como no y en qué he fallado.

# Haciendo las cosas despacio.

Las cosas que se consiguen y se hacen rápido no merecen la pena, acaban perdiendo todo su interés.

Para ver resultados hay que tener paciencia, y la intuición natural me dice que las cosas debo de hacerlas deprisa.

Más importante que hacer las cosas deprisa, es hacerlas con precisión.

# Con trabajo y con esfuerzo.

Y para eso, te dejo este VIDEO TUTORIAL:

¡Gracias por tu lectura!… y por tu comentario.

En el post me referí a un autor y a una frase de uno de sus libros:

Charles Duhigg del libro “El poder de los hábitos”

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Rafa García

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