
Resulta completamente normal que tras perder a alguien a quien hemos querido mucho atravesemos un período de dolor y desconsuelo que nadie parece comprender ni ser capaz de aliviar.
Por eso, nos gustaría ofrecerte algunos consejos que quizá podrían ayudarte a hacer más llevadera esta dolorosa situación:
-Habla con los demás sobre el fallecido. Es muy bueno para ti que te desahogues y compartas con quienes te rodean tus opiniones y sentimientos acerca de esta persona. De nada sirve tratar de negarlo, pues eso no hace más que aumentar el sufrimiento.
-Llora cuanto necesites. Es normal que sientas tristeza, de forma que no tengas reparos en llorar cuando te haga falta, pues hacerlo te ayudará a expresar tus sentimientos de forma apropiada.
-No te culpes. Algunas personas tienden a sentirse culpables por circunstancias tales como creer que no han atendido bien al fallecido cuando lo necesitaba, pensar que han contribuido indirectamente a su muerte, etc. Esto no son más que pensamientos negativos que utilizamos para buscar razones ante lo inexplicable que nos resulta la muerte.
-Y finalmente, mira el lado positivo de las cosas. Enorgullécete de lo mucho que significó esta persona en tu vida y esfuérzate por hacer que su recuerdo viva siempre dentro de ti. No trates de olvidar y enterrar el pasado, sino de continuar tu vida feliz de haber compartido tu tiempo con ella.
