Revista Libros
Hong Kong, principio de los años sesenta, una sociedad tradicional, de jerarquías rígidas donde hombres y mujeres juegan a la felicidad conyugal mientras despliegan vidas amorosas clandestinas. Ese es el contexto que Wong Kar Wai elige para narrar Con ánimo de amar, una película tiene apenas diez años y ya es un clásico de la ficción sentimental.Un hombre, el señor Cheung y una mujer, la señora Chang 8la mujer mejor vestida de la historia del cine) acaban de alquilar cuartos en departamentos vecinos y se mudan exactamente al mismo tiempo. Los dos están casados pero sus respectivos cónyuges pasan la mayoría del tiempo afuera, de viaje y solo aparecen como voces o en boca de los protagonistas. Además de una pared medianera, Cheung y Chang comparten el mal de la soledad, el bodegón donde bajan a comprar comida para llevar y, con el tiempo, una evidencia dolorosa: la certeza de que la esposa de él y el marido de ella son amantes.
Por la ley de la simetría que Wong Kar Wai despliega siempre en cada una de sus películas, Cheung y Chang se vuelven amantes a su modo, un modo silencioso, dividido, perversamente asordinado como sólo pueden ser amantes dos víctimas del desamor. Cheung y Chang son esclavos de sus verdugos, viven pendientes de ellos, los nombran en sus conversaciones, los imaginan juntos incluso hacen de ellos- en una especie de desolador teatro doméstico- para entender cómo son cuando no los ven, cómo hablan y aman y se pelean mientras los traicionan. Amordazada y nunca consumada, la pasión que hay entre los dos protagonistas nace y crece a la sombra de la otra, la invisible, la que solo intuimos.Pero si Con ánimo de amar es un clásico del cine de amor es porque esa relación triste y reprimida- Reflejo desgarrado de la otra- está filmada con la languidez, el timing sensual y la voluptuosidad que solo merecen las grandes pasiones románticas. Cheung y Chang nunca llegan a tocarse pero la distancia física que los separa está más cargada de energía erótica que una película porno. Con ánimo de amar es melodrama puro, melodrama en clave contemporánea, un film a caballo entre Proust y .... que hace de la imposibilidad un prodigio de la pasión amorosa.
Presentación realizada por Alan Pauls en febrero-marzo de 2011 en en Primer Plano I.Sat.Transcripción del siguiente enlace audiovisual: https://vimeo.com/19400348