El Juego de Las Sangres
Las consecuencias de los juegos anteriormente mencionados en el blog no son desdeñables en modo alguno, y una muestra sangrante de ello son los grupos sanguíneos. Como no soy un experto en el tema ni este pequeño artículo está dedicado a estudiantes de medicina vamos a meternos en harina y ver cuánto somos capaces de comprender, como si estuviéramos jugando.Cuatro grandes grupos sanguíneos
O, Original, el propio de la raza humana por decirlo claramente, es el que procede de nuestros antepasados más lejanos. Al parecer ya los neandertales tenían este tipo de sangre; es el grupo preponderante en la raza humana y en especial en África y América; su sangre no tiene antígenos en la membrana exterior pero en su plasma hay anticuerpos para los A y B, presentes en los chimpancés y en los gorilas.
A, Alterado, contiene el antígeno A en sus eritrocitos y anticuerpos del B en su plasma. Algunos antropólogos y arqueólogos sostienen la teoría de que este grupo de sangre era muy común en las poblaciones que vivían en la zona del Cáucaso y las orillas del Mar Negro hace más de 15.000 años; con sus migraciones hacia Asia Central, India e Europa hicieron que este grupo sea el segundo en importancia tras el O.
B, otra mutación que contiene el antígeno B y los anticuerpos del A. De igual modo debió de concentrarse en la población de las gentes que vivían en la zona entre el Mar de Aral y Los Montes Altái hace unos 12.000 años; sus migraciones hicieron que este tipo de sangre sea el más común en Asia, especialmente en zonas de India, Mongolia y Siberia.En principio se podría pensar que estos tres grupos no se podrían mezclar unos con otros, no habría descendencia, pero esto no es así y los europeos modernos somos la prueba. Tres grandes grupos sanguíneos procedentes de nuestros más lejanos antepasados, ¿qué nos está diciendo esto? Tres grandes grupos ancestrales: Neandertales, Denisovanos y Cromañones. ¡Y se mezclaron entre sí! Y a saber las monerías que habrían hecho sus erectos antepasados.
AB, la unión de los A y B ha traído consigo la aparición de un cuarto grupo sanguíneo uniendo los antígenos A y B pero careciendo de anticuerpos. Algunos investigadores sostienen que apareció en Europa Central aproximadamente tras la caída del Imperio Romano, los Hunos y tras ellos otros grupos e imperios orientales fueron llevando la sangre tipo B hacia Europa y es en esa zona donde se encuentra la mayor concentración de personas con este tipo de sangre, bastante escaso dado su “reciente nacimiento”¿Ya tenemos algo en claro? Pues ahora vamos con el factor Rh, y de cuatro grupos vamos a pasar a muchos más en poco tiempo. ¿Qué es el factor Rh? Para descubrirlo tendremos que entrar en el interior de la sangre.Es una proteína integral presente en la membrana de los glóbulos rojos; la mayor parte de la población mundial tiene el llamado Rh+; pero también existe el grupo de los Rh−, que tienen una alteración en los aminoácidos de esta proteína. Esta proteína alterada genera anticuerpos (llamados aglutininas) en el plasma que reaccionan al entrar en contacto con la sangre Rh+ y producir peligrosos glóbulos en la sangre, tal vez la muerte. Al factor –, negativo, se le denomina recesivo y podría ser el Rh original. Se conocen 45 antígenos presentes en la sangre humana siendo 5 los más comunes, así que ir haciéndose a la idea de la complejidad del asunto.Las personas que sufren mutación en su gen RHCE, uno de los cinco más comunes, da lugar al Síndrome de Rh nulo, desarrollando a continuación anemia hemolítica y sin un buen tratamiento a tiempo muerte segura. A lo tonto y a lo bobo ya tenemos 12 grandes tipos de sangre humana y no hemos hecho más que rascar la superficie del asunto, pues si atendemos a las variedades de glóbulos rojos tendremos 27 grupos, y si lo que observamos es el plasma sanguíneo tendremos ¡otros 27 grupos! Ya vamos por 66.¿No les parece interesante y digno de meditación el asunto? Por ejemplo: ¿cuándo apareció el Rh−? Buena pregunta, todo hace pensar que con el propio ser humano moderno pues ese factor recesivo está presente en los cuatro grupos sanguíneos; eso sí de un modo muy minoritario, ergo: esto ya venía de muy atrás.Otra buena pregunta: si todos los seres humanos actuales y las razas ancestrales ya extintas provenimos de unos primates que habitaron el planeta hace millones de años ¿cómo es que mutó la proteína Rh? Provocando así una división eterna entre los humanes (Llamo humanes a todos los tipos humanoides que han habitado este planeta) Primero una división en el grupo Original por el Rh y después tres más al aparecer los tipos A y B, ¡diversión asegurada! Y estoy comentando el asunto muy, pero que muy, por encima.Recapitulando: la actual raza humana es una mezcolanza de 12 tipos básicos de sangre diferenciados, más los 27 por sus glóbulos rojos y otros tantos por su plasma sanguíneo. A la primigenia división que separó a los humanos por su Rh se fueron sucediendo una serie de “mutaciones”, yo más bien diría “intervenciones”; es lo que yo voy entendiendo.
La primera es la aparición del tipo A, que al irse mezclando con los Originales (con los dos Rh) dio lugar a nuevos tipos étnicos que desde El Cáucaso se fueron extendiendo por el planeta.Una segunda “intervención” hará que en el centro de Asia los grupos con sangre tipo B, (con los dos Rh) y la mezcla con los Originales que pillaran por el camino aparecieran los grupos étnicos tales como mongoles, tártaros, etc.Y por fin la aparición del grupo AB, sin anticuerpos, que puede recibir sangre y procrear con todos los tipos sanguíneos. (Siempre que concuerde el Rh)La curiosidad me lleva a preguntarme el por qué el escaso número de personas con el grupo sanguíneo O− puede donar sangre a todos los demás pero solo recibir de los suyos, siendo tan antigua esta diferenciación ¿cómo han logrado sobrevivir hasta nuestros días? Y el “moderno” tipo de los AB− pueden recibir sangre de todos los demás sin mayores problemas. Si son recesivos, ¿cómo es que tienen esas especiales cualidades?Punto y contrapunto, ¿entienden cómo va el juego? No es una cuestión de tiempo, es el comportamiento, hagamos girar el asunto; al haber cuatro grupos de sangre más los dos tipos de Rh las posibilidades de supervivencia de la especie se multiplican enormemente sobre las de una sola raza con un único tipo de sangre. ¿Entendemos esto?¿Comprenden ahora el tremendo error por el cual tantos pueblos de la antigüedad tenían aquellas terribles leyes raciales? De pena de muerte in situ al que le pillaran haciendo monerías con gente de otro grupo étnico; en España es muy conocido el caso de las Leyes Góticas, las leyes raciales de Los Visigodos, al no mezclarse con los hispanos apenas dejaron rastro en el acervo genético y desaparecieron, cosa que no ocurrió con Los Suevos que rápidamente se mezclaron con las gentes del norte de la península y así su “sangre” enriqueció a la española.Otras “intervenciones” han sido de tipo cultural, las más clamorosas son las que dieron lugar al judeocristianismo y el islamismo, pero han ocurrido en todos los continentes, durante milenios y siguen ocurriendo en nuestros días. Para bien y para mal tenemos que aceptar que esto es así; rebelarse contra ello es algo que unos pocos llevamos ¡en la sangre! Sangre española, por supuesto.Es tan solo un juego.(Mi sangre es del tipo A+, como la de cualquier bonobo o chimpancé africano; nada del otro mundo)Daniel Paniagua Díez