Frédéric Chopin - Nocturnos: - Póstumo No. 20, Do # menor - Op. 27 No. 2, Re b mayor 11’ Franz Liszt - Armonías poéticas y religiosas: Ave Maria (No. 2) 6’ - Estudio de ejecución trascendental: Chasse Neige (No. 12) 6’ - La lúgubre góndola No. 1 4’ - Nubes grises 2’ 30’’ – Mephisto Waltz No. 1 12’ - Ave Maria: Las campanas de Roma 5’ 30’’ George Crumb - Makrokosmos para piano: - Agnus Dei (Symbol) - Mystic Chord - Ghost-nocturne: for the Druids of Stonehenge (Night-Spell II) 11’ Isaac Albéniz - El Corpus Christi en Sevilla (Suite Iberia) 9’
El programa que he puesto arriba fue el que tuve el honor de poder presenciar en vivo y en directo, Félix Ardanaz no solo tocó el piano y se fue, nos metió en contexto, nos hablo de cada compositor, nos narro anécdotas, nos introdujo dentro de la obra y nos transporto a la época exacta de Chopin, Liszt Crumb y Albéniz.
Con la belleza del sonido del piano de fondo y con la delicadeza de los dedos de Félix deslizándose a través de las teclas de este instrumento que me encanta, pude dejar la mente en blanco y solo sentir como las notas fluían de manera perfecta, de forma mágica a través de los dedos de Félix Ardanaz. Él hizo que sintiésemos la música tal y como él la siente y como la ve. Creo que la música clásica es una medicina para todos los males.
Fue un concierto delicioso, si el piano es un instrumento que me encanta como os comentaba, en vivo y en directo me terminó por enamorar y no solo he caído rendida a él, sino también al talentoso Félix Ardanaz que la fama que tiene, se la tiene bien merecida y se lo ha ganado porque no solo conquistó mis oídos, sino también mi corazón. Así que no dejéis escapar una oportunidad de poder escuchar algo maravilloso en vivo y en directo de Félix Ardanaz, que si con el piano puede hacer conciertos que se te quedan grabados en la mente, no me lo imagino como director de orquesta, tiene que ser lo más.
Os contaré una anécdota, y es que de todo el repertorio que se escuchó desconocía a George Crumb, quizás ,porque en mi casa los compositores de este tipo no se escuchan, según mi padre solo hacen "ruido" y no música pero para gustos los colores, así que cuando Félix dijo que llegaba el turno de Crumb y que esta música "se odiaba o te cautivaba" me puse las manos a la cabeza y pensé, ahora si que voy a emitir un veredicto propio y así lo hice. ¿Qué me pareció? Pues todavía lo estoy asimilando, no salí corriendo y tampoco me pareció ruido sino algo distinto, algo diferente, algo que hace fluir tu imaginación y te hace pensar ¿Qué quiere decir lo que está tocando? ¿A qué está imitando? a el mar, a el viento. Solo deciros que estoy deseando que Félix Ardanaz vuelva a tocar en Madrid, porque me voy de cabeza a verle.
-Agradecimientos a Félix Ardanaz Share on Facebook Share on Twitter Share on Google Plus