La receta en si no tiene nada de especial en su preparación salvo el chocolate. Se trata de un guiso normal al que le añadiremos un poquito de chocolate, suficiente para que se produzca el contraste de sabores. No pretendemos preparar una chocolatada y utilizar el conejo como si fuera un bizcocho, así que utilizaremos una cantidad muy pequeña de chocolate, eso si, con un porcentaje de cacao alto para que nos de también ese toque amargo del cacao puro.
Como acompañamiento prepararemos flanes de patata que, con los ingredientes que os doy os dará para 6 flanes individuales muy fáciles de hacer y quedan muy chulos en la presentación del plato.
Seguro que hay gente que nada mas ver el nombre de la receta ya habrá cerrado la pagina. Para los que todavía estáis por ahí vamos con la lista de ingredientes y a los fogones.
Ingredientes:
1 Conejo.
1 Cebolla.
40 gr de Chocolate de Cobertura (min. 70% pureza)
100 ml de Vino Tinto.
100 ml de Vino Blanco.
2 Dientes de Ajo.
Agua
Harina.
Pimienta.
Sal.
Aceite de Oliva.
Para el Flan de Patata:
1/2 kg de Patatas.
1 Diente de Ajo.
3 Huevos.
100 ml de Nata Líquida Para Cocinar.
Romero.
Perejil.
Pimienta.
Sal.
Preparación:
1. Empezaremos por el conejo. Limpiamos bien los trozos de conejo, salpimentamos y dejamos macerar 3 minutos (podemos aprovechar para picar la cebolla y los ajos). Ponemos la olla donde vayamos a preparar la receta al fuego con aceite pasamos los trozos de conejo por harina y vamos cocinando el conejo hasta que nos quede doradito. Sacamos los trozos listo a una fuente y reservamos. No necesitaremos mucho aceite para dorar el conejo, además es el aceite que utilizaremos luego para pochar la cebolla y seguir con el guiso así que si os pasáis con la cantidad a la hora de freír el conejo, al terminar de freírlo deberíais sacar el sobrante.
2. Pelamos las patatas y las ponemos al fuego en una olla con agua para cocerlas. Cuando rompan a hervir les añadimos un poquito de sal. En 15 - 20 minutos estarán cocidas. Podemos ir pinchándolas con un cuchillo para saber cuando están listas.
Ya tenemos el conejo doradito. Picamos bien los ajos y la cebolla en cuadraditos y los ponemos a pochar en la misma olla donde preparamos el conejo (si tiene demasiados restos de harina los quitaremos).
Cuando la cebolla este ya transparente (pochadita) le añadimos los trozos de conejo y dejamos cocinar 5 minutos.
3. Ya tenemos las patatas listas. Las sacamos a un bol grande, con la ayuda de un tenedor las deshacemos bien y dejamos enfriar. un poco. Volvemos al conejo.
Pasados los 5 minutos añadimos al conejo el vino tinto y el vino blanco. Cocinamos a fuego fuerte durante 3 minutos para que se nos evapore el alcohol. Pasados esos 3 minutos añadimos los 40 gr de chocolate y agua hasta que nos quede el conejo casi cubierto. Cocinamos a fuego medio durante 30 minutos removiendo de vez en cuando. Pasados esos 30 minutos ya tendríamos el conejo listo. Solo nos quedaría pasar la salsa por la batidora o por el chino para que nos quede bien fina y reservar hasta tener listo los flanes de patata. Vamos con ellos.
4. Las patatas ya no están tan calientes así que podemos seguir. Precalentamos el horno a 150ºC. Batimos los 3 huevos y los añadimos a la patata machacada. Con la ayuda del tenedor revolvemos bien. Le añadimos la nata y volvemos a revolver bien con el tenedor. Picamos el diente de ajo que nos queda lo mas menudo posible y lo añadimos a la mezcla junto con un poco de romero y de perejil. Salpimentamos y mezclamos bien con las varillas hasta que esté todo bien mezclado.
5. Untamos con un poco de aceite el interior de las flaneras para que no se nos peguen los flanes. Vamos poniendo la mezcla en cada flanera. No las llenaremos del todo ya que los flanes de patata van a subir un poquito. Horneamos a 150ºC durante 45 - 50 minutos. Haremos la comprobación clasica para saber si estan preparados. Introducimos un cuchillo y si sale limpio el flan estará listo.
6. Cuando los flanes estén listos volvemos a poner el conejo al fuego, suave, para darle el último golpe de calor mientras desmoldamos los flanes con la ayuda de un cuchillo. Emplatamos y a disfrutar de este "peculiar" plato.