Conoce a Paquita Dipego

Paquita Dipego
Su carrera se orientó hacia el campo de las Ciencias Empresariales, con un Master posterior en Dirección y Administración de Empresas. Su trabajo, a lo largo de toda la vida ha estado relacionado con el campo financiero, de la Dirección y Administración de Empresas y Auditoria de Cuentas, de alguna manera, se inclinó al tema literario.
Empezó a escribir poesía cuando tenía nueve años, por vocación y desde hace año y medio por absoluta necesidad, fecha en que murió su querida madre. Un poema suyo fue elegido en el periódico la Vanguardia (Nacional en España) en el año 2009 entre 1,364 recibidos y lo publicaron " TE PROMETO MAMA " es su título. Ha publicado en " El laberinto de Ariatna " y seguramente en algún lugar más que no recuerda.
Antonio Gómez Rufo, el gran escritor madrileño, colgó un poema suyo en su Web que ésta le realizara tras leer su estupendo libro " Las noches del Tamarindo”.  Paquita ha colaborado con varias ONG donando poemas para fines benéficos. Es socia de " escritores solidarios" y una digna representante del talento de Mujeres Poetas Internacional.
Nunca ha preocupado por publicar, ni ha perseguido ningún tipo de reconocimiento. Su recompensa es el calor de sus amigos que leen sus trabajos. Quizás algún día se decida.
Paquita Dipego cambió su puesto de ejecutiva en una multinacional hace tres años, para dedicarme por entero a lo que más me gusta: El mundo de la literatura, y en especial la poesía.
Poema:
Mi piel está hecha de sal y agua
y aspira a conocer tu piel de fuego
para hacer estallar el primer acto
en una vocación de trovadores
que se encuentran en un cónclave de rimas
y se aparean en un musgo de caminos
que les conducen a campos de viñedos
para esparcirse y derramarse como el vino
y sembrar alegrías, y sembrarse.
Mis ojos no te conocen, pero eres
lo sé, porque reservé para los tuyos
las inútiles horas malgastadas
en someterme a absurdos tribunales
que confirmarán periplos evitables
y las guardo, en cofres de sosiego
perfumadas de raíces y de flores.
Estrenarás mi cuerpo en tu regazo
seré de nuevo virgen de palabras
podrás lamer los muslos del poema
y yo buscar el verbo amanecido
justo en medio del surco de tu espalda.Gracias por sus aplausos!! Nuestras Poetas lo merecen!