
Otra característica destacable de los pistachos es su composición en proteínas. La arginina es un aminoácido que ayuda a reducir la grasa corporal y contribuye a la formación y al fortalecimiento de los músculos. El contenido en grasas de los pistachos es significativamente inferior que el de otros frutos secos y está demostrado que las personas que siguen dietas de adelgazamiento que incluyen frutos secos ingieren menos calorías y experimentan una mayor sensación de saciedad (el hecho de sacar la cáscara y de verlas en un montón, hace que dejemos antes de comer). 30 g de pistachos proporcionan el 10% de la dósis de fibra diaria recomendada para la población adulta. Contienen también vitaminas del grupo B, vitamina E, vitamina K y ácido fólico, minerales (hierro, selenio, zinc, cobre y manganeso), y carotenoides con acción antioxidante.
En resumen, las proteínas, la fibra y la pocas grasas que contienen los pistachos los convierten en un alimento muy recomendable para el bienestar del corazón - su consumo disminuye los niveles de colesterol y de la presión sanguínea- y de la salud en general.Pinchando en el siguiente enlace podéis conocer más acerca de los frutos secos: Frutos del otoño, un potencial de salud.Si te ha gustado esta entrada, te invito a suscribirte por correo electrónico para recibir todas las novedades del blog en tu bandeja de entrada.---
