En tiempos de tanto estrés en este mundo dinámico y proactivo, las personas necesitan mantener una alimentación saludable y un estado de salud mental óptimo. Sin lugar a dudas uno de esos indicadores para gozar de una buena salud es el sexo.
Íntimamente relacionado con la liberación de toxinas del cuerpo y de la circulación de la sangre. Expertos sexólogos coinciden que mantener una vida sexual activa beneficia el sistema cardiovascular.
La sexualidad forma una parte integral de la personalidad de los seres humanos. Tener un desarrollo pleno es el deseo que cada hombre y mujer sobre esta tierra, y ese complemento es el sexo, porque permite que la persona goce de las satisfacciones básicas como el deseo de contacto físico, expresión emocional, placer, ternura y el amor dado a través de la intimidad sexual.
En qué beneficia tener sexo
Los desórdenes sexuales es una problemática que ha venido afectando a gran número de personas, influyendo en su estatus social, psicológico, sus relaciones con el entorno y la vida diaria. Tanto mujeres como hombres padecen de algún desorden del aparato genital como disfunción eréctil, eyaculación precoz (hombres), la anorgasmia (mujeres). Estos desordenes se presentan por varias razones como anomalías congénitas o adquiridas. Todas tienen solución, depende de la persona en su estilo de vida.
Los beneficios de la expresión sexual para la salud, tienen un fundamento legal, sustentado como un derecho humano fundamental y universal declarado "derecho del placer sexual", y fue para el año 1944 que lo aprobaron ante el XIV Congreso Internacional de Sexología. Participaron expertos sexólogos de todo el mundo, en ese congreso se declaró que "el placer sexual, incluyendo el autoerotismo, es una fuente de bienestar físico, psicológico y espiritual".
Importancia de tener sexo según la ciencia
Un estudio en Carolina del Norte (1982) sobre el tiempo de vida con la participación de 252 personas de diversas razas revelo que los indicadores de longevidad el goce de la actividad sexual es resultante para su tiempo de vida. Los hombres manifestaron más goce de las relaciones sexuales mientras que las mujeres longevas manifestaron goce en su intimidad sexual.
Está comprobado científicamente que la actividad sexual, contribuye en la salud del organismo. Tal es el caso de las investigaciones formuladas por el Doctor en Biología Vladimir Antonov en su publicación "Sexología", trata sobre los aspectos bioenergeticos del sexo y su incidencia en el bienestar físico, psicológico y social de las personas. Explica que "uno de los problemas que afecta la función sexual es el alto consumo de carnes".
La actividad sexual y la salud
Los beneficios del sexo están reflejados en:- Longevidad. En este caso, las investigaciones en personas adultas mayores entre 45 y 59 años que han presentado historias clínicas con presión arterial, cardiovascular, colesterol ha dado como resultado que de cada 100 solo 40 presentan orgasmos y estas tienden a mejorar su condición de salud.
- Disminución de enfermedades cardiacas y cerebro vascular. Mientras mayor frecuencia de relación sexual, menor riesgo de sufrir enfermedades cardiovascular.
- Se previenen enfermedades endocrinas.
- Reduce los riesgos de cáncer de mama.
- El orgasmo favorece en sistema inmunológico.
- Previene y reduce los riesgos de cáncer de próstata.
- Ayuda a conciliar el sueño reduciendo las manifestaciones de insomnio. El orgasmo produce un volumen de oxitocina y endorfinas.
- Reduce los riesgos de endometritis.
- Ayuda a regularizar el control menstrual en la mujer.
- En varios casos se ha demostrado que reduce los dolores menstruales (abdominales).
- El orgasmo funciona como analgésico para aliviar el dolor de cabeza o migraña.
- Reduce los dolores musculares y de espalda.
- Mejora la calidad de vida, genera motivación y aptitud positiva
- Reduce la violencia en personas con enfermedades psiquiátricas.