Conociendo Cantabria a través de sus ríos

Río Aguero | Autor: Rozas45`s Conocer Cantabria desde sus ríos es una original forma de adentrarse en algunos de los paisajes más bellos de la región, y disfrutar de actividades al aire libre casi en cualquier época del año. Los ríos cántabros que desembocan en el Cantábrico son cortos y rápidos, muchos de ellos lugares ideales para la pesca deportiva del salmón o la trucha o para la práctica de deportes de aventura como el descenso de cañones, piragua o hidrospeed, entre otros. Piscinas naturales, pequeños toboganes, saltos… se pueden encontrar en los cursos altos de ríos y arroyos, son lugares escondidos y, a veces, sólo visitados por los vecinos de los alrededores. Una buena propuesta para conocer Cantabria es haciéndolo desde sus ríos, recorriendo algunos de los principales cauces fluviales, desde su nacimiento a su desembocadura, deteniéndonos en algunas de las localidades y parajes por los que pasan y algunas de las actividades que se pueden realizar en ellos. Río Aguera | Autor: Rozas45`s -Río Agüera. Este río nace en las estribaciones del Burgueño, discurre entre territorio de Cantabria, en concreto el municipio de Valle de Villaverde, y del País Vasco y tan sólo mide 27 kilómetros. Entre los pueblos que atraviesa están Guriezo o La Matanza, este último es la capital del municipio cántabro de Valle de Villaverde, que se ubica dentro del territorio de Vizcaya, y en él se halla el Museo de Etnografía de Villaverde. El río Agüera desemboca en la ría de Oriñón, junto a Castro Urdiales. Río Asón -Río Asón. Nace en los collados del Asón, en el municipio de Soba, y atraviesa localidades como Arredondo, Ramales de la Victoria, Ampuero o Colindres. El nacimiento del río Asón es una surgencia kárstica que se precipita al vacío en una inmensa y bella cascada de más de 50 metros de altura, en forma de cola de caballo. Este río da nombre al Parque Natural de los Collados del Asón, donde existe una red hídrica subterránea compuesta por un conjunto de conducciones con dimensiones entre los 2 y los 30 kilómetros que se intercomunican entre ellas. Se trata de un entramado cuyas dimensiones hacen de esta red subterránea una de las más grandes de Europa. En esta zona se encuentra la cueva de Covalanas, una de las diez cavidades cántabras con arte paleolítico declaradas Patrimonio de la Humanidad. La desembocadura del río Asón, en Colindres, da lugar a una de las rías que se integran dentro del Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria, Noja y Joyel, uno de los santuarios de aves acuáticas del norte de España. El cauce del río Asón y de algunos de sus principales afluentes como el Gándara es propicio para la realización de deportes de aventura como el rafting, hidrospeed o el descenso de cañones. Igualmente, dentro de las marismas de Santoña se pueden realizar excursiones en canoa. Río Miera -Río Miera. Nace en el Portillo de Lunada y en su paso hasta su desembocadura en la ría de Cubas en la bahía de Santander, atraviesa localidades de la comarca pasiega como San Roque de Riomiera, Liérganes, la Cavada o Solares. Su nacimiento se produce en un entorno en el que se pueden observar las huellas de un pasado glaciar que, actualmente, están al abrigo de los hayedos. En la zona se conservan restos del “Resbaladero”. Éste era el lugar desde el que se dejaban caer los troncos para la Real Fábrica de Cañones de La Cavada y destaca por las inigualables vistas de este resbaladero y de toda la cabecera del Miera. A través del cauce del Miera, se puede realizar un viaje hasta el Paleolítico como el que nos ofrece la Cueva de Sopeña en la que se han realizado unas espectaculares reproducciones de las pinturas de la cueva del Salitre. Aunque ésta no es la única cavidad que se puede encontrar en el valle del Miera. El paisaje kárstico que caracteriza a esta zona ha inspirado la curiosidad de espeleólogos y expertos que han logrado unir dos cavidades en el Alto del Tejuelo que tienen un recorrido superior a los 77 Km. Una de las localidades más importantes en cuanto a patrimonio arquitectónico de las que atraviesa este río es Liérganes, donde se ubica el Fluviarium, y donde es posible ver multitud de ejemplos de edificaciones típicamente montañesas, palacios y casonas. La ría de Cubas se asoma al mar por la localidad de Pedreña, y su salida está flanqueada por la gran playa del Puntal. Este río es navegable en su tramo último, cuando ya asoma la ría. Es muy habitual encontrarse en su cauce con aficionados a la piragua, el kayak… Río Pisueña | Autor: Pedro Ferrer -Río Pisueña. Junto con el Pas y el Miera, sus vegas conforman los valles pasiegos. Nace en Selaya, y desemboca en el río Pas a la altura de Vargas. Atraviesa, entre otros, la localidad de Villacarriedo. En el tramo alto del río, cerca del nacimiento, podemos encontrar palacios como el de Donadío en Selaya o el de Soñanes en Villacarriedo. La vega del Pisueña riega poblaciones como Castañeda, donde encontramos ejemplos únicos del románico como la Colegiata de Castañeda, San Andrés y Santa María de Cayón. Muy cerca de este curso fluvial se halla el Parque de la Naturaleza de Cabárceno, con sus más de 700 ha de paisaje lunar y sus más de 1.000 animales de los cinco continentes en régimen de semilibertad. Nacimiento del río Pas | Autor: Paula ( paula_gm, flickr ) -Río Pas. Desde su nacimiento en las estribaciones de Castro Valnera a su desembocadura en la bella ría de Mogro, el río Pas es uno de los ríos más emblemáticos de la región. Su fama de río salmonero atrae cada año a cientos de aficionados a la pesca deportiva en busca del preciado trofeo del ‘campanu’. En la cuenca alta baña las localidades de la Vega de Pas, Ontaneda y Puente Viesgo, entre otras, y ya en su parte baja las vegas de Oruña o Mogro. Este río, que da nombre a toda la comarca pasiega, deja a su paso en los tramos altos, un paisaje de cabañas, una tradición etnográfica singular y una gastronomía propia, en la que destacan sus dulces típicos como la quesada o los sobaos, los helados caseros y los quesucos de nata. El Pas también se distingue por las fuentes termales que surgen a su paso, que son aprovechadas para fines terapéuticos en los balnearios de Alceda y Puente Viesgo, este último una de las referencias termales a nivel nacional. En esta parte del río y, posiblemente, gracias a su presencia, se tiene constancia de la presencia del hombre desde 200.000 años atrás, en el complejo de cuevas del Monte Castillo de Puente Viesgo, entre las que se hallan tres de las cavidades con arte paleolítico declaradas Patrimonio de la Humanidad: El Castillo, Las Chimeneas y La Pasiega. El Pas en su tramo bajo se adentra en la costa formando un bello estuario, la ría de Mogro, que accede al mar a través de la playa de Valdearenas, uno de los paraísos del surf en la región, que está dentro del Parque Natural de las Dunas de Liencres, el sistema dunar más importante del norte de España. La pesca deportiva o el piragüismo son dos de las actividades que se pueden realizar en este río.