La mayoría de las embarazadas suelen tener este problema después de dar a luz. Y es que, entran en juego, tanto cuestiones físicas como psicológicas, que hacen que el tránsito intestinal no funcione como es habitual. Pero sin duda, existen múltiples consejos para hacer que el cuerpo de la mujer vaya recuperando la normalidad y que, en poco tiempo vuelva a ir al baño como antes.
En primer lugar, es habitual que, tras el parto, se sienta cansada o incómoda, e incluso dolorida en el caso de que tenga puntos.
Sin embargo, no deberá abandonarse al sedentarismo y por ello, deberá hacer todo lo posible por levantarse de la cama cuanto antes, pasear por el pasillo del hospital, dar algún paseo también con su bebé, mover las piernas... y es que, de este modo, facilitará el tránsito intestinal y activará el intestino.
Los ejercicios de Kegel y el estreñimiento en el posparto
También son beneficiosos los ejercicios de Kegel. Podrá realizarlos incluso prácticamente después del parto y aunque ya se sabe que son muy positivos durante el embarazo para dar elasticidad al perineo, también lo son para el recto.
Sin embargo, además de lo indicado, también será fundamental y de gran ayuda para combatir el estreñimiento, seguir una alimentación variada, equilibrada y sobre todo rica en fibra. De este modo, en el menú deberán incluirse alimentos como los cereales integrales, las verduras, las hortalizas, así como frutas, entre las que cabe destacar, las ciruelas, los kiwis y los albaricoques. También deberá tomar legumbres, que son indicadas también para acabar este problema. Sin duda, siguiendo estos pasos alimenticios ayudaremos a nuestro aparato digestivo a que se recupere después de todas las alteraciones que ha sufrido desde que comenzó el embarazo hasta que el pequeño llegó al mundo. Además, en el caso de que, por ejemplo, haya sufrido cesárea y deba guardar reposo, tomará mayor importancia el hecho de seguir esta alimentación rica en fibra, ya que no podrá moverse para facilitar el tránsito intestinal.
También será importante que la mujer beba abundante líquido, que esté bien hidratada, ya que esto servirá para ablandar las heces y facilitar el proceso, así como para compensar la pérdida de líquido que habrá tenido durante el parto.
Aun así, si la mujer observa que no consigue solucionar el problema siguiendo estas medidas, será conveniente que acuda a su médico para que le indique qué hacer. Los especialistas suelen aconsejar o recomendar ablandadores de heces o incluso laxantes, siempre naturales, aunque en los casos en que la mujer esté amamantando a su pequeño, ese efecto laxante es posible que pase al bebé a través de la ingesta de la leche.
Es un problema frecuente que si se convierte en una molestia importante habrá que acudir al médico
De este modo, y a pesar de todo lo dicho, la mujer debe intentar no agobiarse con este problema y mantenerse tranquila, ya que, sobre todo la primera evacuación, suele tardar en producirse, es lo natural. Así, una vez que se produzcan las primeras deposiciones, es cierto que, al principio, pueden ser dolorosas, pero poco a poco irá desapareciendo el dolor, ya que las heces se ablandan y la mujer volverá a recuperar la normalidad de la función intestinal. En poco tiempo, el estreñimiento desaparecerá e incluso, tampoco será motivo de preocupación en los casos en que la mujer ya haya empezado a recuperar la normalidad y haya logrado sus primeras deposiciones y de repente, de nuevo, vuelva a costarle y esté estreñida otra vez. Y es que el cuerpo está recuperándose de todos los cambios sufridos poco a poco. Así, aunque esto ocurra, no habrá que alarmarse, ya que tarde o temprano, este problema se solucionará.