La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 2016 como Año Internacional de las Legumbres por varios motivos, por ser un alimento muy eficiente para la nutrición humana, aportando nutrientes esenciales que mejoran el sistema inmunitario y previenen distintas enfermedades, por contribuir a mejorar la seguridad alimentaria del planeta, por ser un alimento que ayuda a poner freno al sobrepeso y la obesidad, etc.
La FAO ha puesto en marcha una página en torno a esta celebración en la que se dan a conocer los eventos que se celebran en todo el mundo en honor a las legumbres, así como un recetario con diferentes tipos de legumbres, noticias sobre los descubrimientos científicos y otras informaciones de interés. Y también ha dado a conocer una serie de consejos para conseguir que los niños coman legumbres.
Las legumbres son un ingrediente muy versátil que se presta a todo tipo de elaboraciones culinarias, se pueden utilizar como plato principal, como guarnición, en aperitivos e incluso en postres. Lamentablemente es un alimento que muchos niños no aceptan, lentejas, judías, guisantes y otras variedades de legumbres no son un alimento precisamente popular entre los niños. Por eso la FAO ha proporcionado unos sencillos consejos que pueden ayudar a que los pequeños acepten de mejor grado este alimento.
La elaboración y presentación de las legumbres es un tema importante, se puede citar por ejemplo el hummus, se trata de un puré de garbanzos condimentado con especias, que se acompaña con un pan tostado, pan pita, etc., y que suele gustar a una buena parte de los niños. Teniendo como referencia que esta presentación de los garbanzos es más aceptada que las presentaciones tradicionales, se puede trasladar este tipo de elaboración a cualquier otra variedad de legumbres, lo que aumentará la posibilidad de que los niños las prueben. Otras recetas que también llaman la atención son las albóndigas o las hamburguesas, que aunque parecen de carne, están elaboradas con legumbres y ofrecen un sabor exquisito.
Como ya hemos comentado en otras ocasiones, hacer que los niños participen en las elaboraciones culinarias es importante para que tengan más predisposición a probar y disfrutar de la comida, así que hay que dejar que los niños elijan qué tipo de legumbres quieren comer y permitir que ayuden a preparar el plato, será una forma de conseguir que las coman, o al menos que las empiecen a probar.
La presentación es un tema importante, hacer que los platos sean llamativos y divertidos facilitará que los prueben. Al respecto os recomendamos retomar la lectura de este post en el que hablamos de una madre que prepara las comidas de los niños convirtiéndolas en obras de arte, los platos muestran personajes infantiles, paisajes, etc., que invitan a los niños a comer.
Mezclar las legumbres con sopas y las salsas preferidas de los niños también es una buena opción, las legumbres proporcionarán sabor, profundidad y harán más contundentes y nutritivas las comidas. Otra idea es incluirlas en los postres, en muchos países (incluído el nuestro) se utilizan para preparar pasteles y bollos, las alubias o fríjoles negros cocidos pueden reemplazar a los huevos y/o a la mantequilla en muchas recetas de pasteles de chocolate y brownies, y los niños los disfrutan sin saber que están comiendo legumbres.
Como podéis comprobar, son consejos sencillos que serán de gran ayuda para facilitar la introducción de las legumbres en la dieta infantil. Os invitamos a acceder a la página oficial de la FAO y conocer más particularidades de las legumbres, un alimento que aporta muchos beneficios y que no debe ser obviado.
Foto | Gastronomía & Cía
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Consejos para conseguir que los niños coman legumbres