En este sencillo post queremos compartirles nuestros consejos para viajar en avión con bebés (algunos también aplican para viajar con niños mayores de 2 años). Todo lo que les contamos está basado en nuestra experiencia y en otros consejos que nos dieron algunos lectores antes de salir para #europamagica2015
Conocé a tu bebé
Parece obvio, pero no lo es tanto. Tu bebé seguirá siendo el mismo arriba del avión, por lo tanto, mantendrá los mismos gustos y las mismas actitudes (y hasta es casi seguro que, si no hay largas escalas de por medio o algún comportamiento extraño, mantenga sus mismos horarios). Por eso, tené en cuenta qué le gusta, qué come, qué lo distrae, cuánto duerme, etcétera. Todo esto te ayudará mucho a hacer más llevadero el viaje y a planificarlo mejor (dentro de lo posible, claro).
Elección del vuelo
Relacionado con lo anterior, si tu bebé suele dormir bien de noche es muy aconsejable que trates de tomar un vuelo nocturno. Obviamente que esto estará sujeto a la disponibilidad de vuelos entre los destinos que quieras unir, pero para nosotros fue una gran solución en el primer vuelo de Tahiel de más de 20 horas.
Elección del asiento
Muchos nos decían que tratemos de pedir los asientos de adelante, en los que hay más espacio, pero no siempre es la mejor opción. ¿Por qué? Porque los apoya brazo no se levantan.
Si tu bebé tiene menos de 7-8 meses y puede dormir en la cuna que te dan las aerolíneas, sí tenés que pedir esos asientos, porque son los ideales, ya que las cunas se colocan en las “paredes” que quedan frente a los asientos. Pero si tu bebé ya no puede dormir en la cuna, por el peso, tendrá que dormir encima tuyo o, lo que es mejor, en el asiento vacío que puedas coseguir al lado del tuyo.
Si viajan dos adultos y un bebé, lo ideal es llegar temprano al aeropuerto para hacer el check in pronto y reservar en la fila de tres asientos, los dos de los extremos. Se supone que, salvo que el vuelo esté lleno, casi nadie va a querer estar en el asiento del medio. Además, hay que estar con buena onda en ese momento porque se le puede pedir a la persona que hace el check in por el bloqueo de ese asiento. No sé cuánto hay de cierto en esto, no sé si en todas las aerolíenas lo hacen, pero a nosotros nos pasó que el chico que nos atendió lo hizo. Es más, él mismo nos lo propuso. Por lo que no debe ser la primera vez que lo hace. Esto fue en el primer vuelo. Estábamos muy cómodos porque Tahiel se pudo sentar en el asiento del medio y pudo dormir sin problemas. Además, como en el vuelo había espacio, a la noche Dino se pasó a otro asiento y el rey de la familia se acostó en los dos asientos vacíos.
En el segundo vuelo, en cambio, nos dieron ventanilla y centro, por lo que el asiento del pasillo estaba ocupado. Pero como vimos que quedaban algunos lugares vacíos en el avión (no muchos) nos apuramos a preguntarle a la persona que estaba al lado nuestro si le molestaba cambiarse de lugar así teníamos el espacio para Tahiel. No hubo problema y pudimos usar los tres asientos nuevamente.
Muchos dirán que fue suerte. Creo que sí.
En caso de no contar con este asiento vacío, sí o sí deberían conseguir el asiento del pasillo. ¿Por qué? Porque eso les va a permitir salir más rápido, poder caminar con el bebé por el pasillo y tener un poco más de movilidad en el pequeño espacio que hay.
Entretenimientos o ¿Cómo hago para que se quede quieto?
Quieto, quieto, no creo que se quede durante todo el vuelo, pero podemos lograr entretenerlo bastante. Eso sí, se encesita una dosis extra de paciencia porque será necesario entretenerlo todo el tiempo.
Como dijimos, cada bebé tiene sus gustos y sus manías. Por eso, es importante conocerlas para saber cómo pasar las horas durante el vuelo.
Una buena idea es llevarle sus dibujos, series o películas preferidas grabadas en una tablet, una netbook o un teléfono. Digo “grabada” porque recuerden que no hay acceso a internet. Pero, como nos dijo una lectora en otro comentario, no le pongan los videos apenas suban al avión. Todos sabemos que la mayoría de los chicos (y los grandes) se quedan embobados al ver la pantalla, entonces conviene dejar esta herramienta de distracción para los momentos que más la necesitemos.
Lleven algún juguete o muñeco que sea conocido por el bebé, para que lo sienta familiar. Por ejemplo, algunos bebés de más de un año tienen lo que se llama “objeto transicional”, que en general es algún muñeco.
Además, lleven algún juguete o libro nuevo. Cuando los chicos ven algo nuevo, en general, tenemos asegurados unos minutos de distracción.
Pero como todos los papás sabemos, muchas veces los chicos se entretienen con las cosas que menos nos imaginamos y que no son juguetes. En el caso de Tahiel, fue el control remoto de la pantalla. Se pasó varios minutos sacando y poniendo el control remoto, apretando los botones y usándolo de teléfono. El único problema fue que uno de esos botones llamaba a la azafata…
Yo también le llevé unos lápices de colores para que pinte, pero no tuve mucho éxito en el intento. Tendría que haberlo imaginado, ya que en casa tampoco es de pintar mucho. Todavía no es algo que le guste mucho hacer porque es algo que suelen hacer cuando son un poco más grandes, aunque ya tengo guardada alguna que otra “obra de arte”.
¿Cómo lo cambiamos? ¿Cómo vamos al baño?
Nosotros por suerte solo tuvimos que cambiarlo una vez en el vuelo y solo fue porque había hecho pis. Un consejo es cambiarlo siempre antes de subir al avión. Aunque esto no garantiza que no haya que cambiarlo durante el vuelo, puede ayudar a que zafemos.
Lo peor de cambiarlo en el vuelo es el poco espacio que hay en el baño. Les recomendamos, como nos dijo también una lectora, que entre un solo adulto al baño para cambiarlo, pero que el otro se quede al lado para alcanzarle las cosas, como las toallitas húmedas y el pañal. Si viajás solo/a lo cambiarás como en cualquier otro lado, pero con más cuidado por el poco espacio. Por ejemplo, en el vuelo que lo cambiamos a Tahiel, la cabecita casi que tocaba el recipiente de los papeles para secarse las manos y él estaba muy muy incómodo.
Por otra parte, si viajás solo/sola con un bebé, una de las opciones para que vayas al baño es que el bebé se quede con alguna de las azafatas. Otra opción es que lleves algún fular o portabebés para que lo coloques en tu espalda y puedas ir al baño.
¿Cómo hacemos para comer?
Esta era una de nuestras mayores inquietudes. Dino tenía mucho miedo que Tahiel haga un desastre mientrs comíamos.
Pensamos en comer por separado, primero uno y después otro, pero el tiempo destinado a la comida está estipulado y es poco. Por eso, si quieren hacer eso, deben hablar con la azafata y explicarle la situación. A lo mejor logran que les traiga la comida a uno de los dos unos minutos después. El único problema que pueden llegar a tener es que la comida no esté en su punto justo en cuanto a la temperatura, ya que como leímos hace poco en un post, la comida se calienta el tiempo justo para que dure con la temperatura deseada hasta llegar a la bandeja del consumidor.
Si estás solo/sola, podés tener suerte y que en ese momento tu bebé esté durmiendo o, si está muy fastidioso justo en ese momento, una opción es que te pares y lo tengas a upa mientras vas comiendo con una mano (ya estarás acostumbrado/a a hacer muchas cosas con una sola mano). Otra opción es que lo tengas a upa y que puedas poner la bandeja en el asiento de al lado, si está vacío, y comas de costado. Así comí yo en uno de los vuelos. Tahiel estaba a upa mío jugando y entretenido con el queso blanco y mi bandeja estaba en el asiento del medio. Con una mano y la ayuda del tenedor, fui comiendo como pude.
¿Qué come el bebé?
Es recomendable llevar más cantidad de leche de la que suponemos que va a tomar durante el vuelo. En nuestro caso, llevamos un kilo de leche en polvo deslactosada, que es la que toma Tahiel, ya que teníamos dos días hasta llegar a Madrid. En caso de que no tomo leche en polvo, deberás llevar paquetes individuales, ya que la leche de un litro no tendremos donde refrigerarla.
Si ya come alimentos sólidos, existe la posibilidad de darle la comida enlatada para bebé que te ofrecen en el avión (según algunas aerolíneas es aconsejable bookearla antes, pero en otras no porque siempre tienen algunas porciones de comida para bebés) o llevar la comida que sabemos que les gusta. Si está envuelta al vacío, mucho mejor, porque dura más.
En los controles aéreos está permitido llevar la leche y la comida del bebé.
Dolor de oídos
En general, el mayor problema con los oídos es en el aterrizaje, aunque muchos también lo sufren en el despegue. Tahiel solo lo sintió en el aterrizaje y la solución fue darle una mamadera para que succione. Por eso, recomendamos tener a mano una mamadera, de leche o de agua, y dársela en ese momento si ven que es necesario. Otra opción que leímos pero no usamos es ponerle los tapones que te dan en muchos vuelos o compralos antes en una farmacia.
Si el bebé es lactante es aconsejable darle el pecho en el despegue y el aterrizaje. En este caso, además, tratá de tener siempre agua a mano para que no te deshidrates.
Paciencia. Relax.
Una de las principales actitudes que hay que tener es paciencia y la capacidad de relajarnos. No pensar en el que van a decir, que digan lo que quieran. Estás con un bebé y tiene el mismo derecho que ellos de viajar. Sabemos que a veces se ponen molestos, pero no podemos hacer más que intentar calmarlos. Si nosotros nos ponemos nerviosos por “el que dirán”, los bebés lo perciben y no se calmarán.
Además, es buena idea saludar con una sonrisa a los vecinos de asiento. Nunca se sabe si vamos a necesitar que nos ayuden.
Otras cuestiones a tener en cuenta y preguntas frecuentes
¿Los bebés pagan pasajes de avión?
Los bebés de menos de 2 años no pagan pasaje y viajan a upa de un adulto. Pagan solo algunos impuestos. Apenas subas al vuelo, pedile a la azafata el cinturón de seguridad para ti bebé.
¿Qué documentos necesita un bebé para viajar en avión?
El pasaporte al día.
En la Argentina, hasta hace unos meses, si el bebé viajaba con los dos padres era necesario llevar la partida de nacimiento original o la libreta de matrimonio para presentar en migraciones. Ahora, alcanza con mostrar el nuevo DNI del bebé que tiene los nombres de los padres.
En caso de que el bebé viaje con uno solo de los padres es necesario presentar la autorización del otro para sacar al hijo del país.
¿Se puede llevar el cochecito en el avión o hay que despacharlo?
En la mayoría de las aerolíneas podés llevar el cochecito en el avión. Lo tenés que entregar al ingresar al avión y el personal de la aerolínea lo guardará en un lugar seguro. Cuando bajes lo tenés que pedir. Si el vuelo es directo, puede que sea más cómodo despacharlo, pero si el vuelo es con escalas es mejor tenerlo al bajar del avió.
¿Qué equipaje llevar para el bebé en el avión?
– Juguetes, libros o cualquier cosa que lo distraiga.
– comida y leche.- pañales y toallitas húmedas.
– mamaderas.
– muda de ropa para cambirlo (si el vuelo es muy largo, aconsejamos llevar dos).
– algún remedio que pueda necesitar tomar durante el vuelo.
Más allá de todos estos datos y consejos es buena idea ponerse en contacto con la aerolínea en la que vueles y preguntar/corroborar todos los ítems, como la comida, la cuna, el cochecito, etcétera.
Los invitamos a ver el video del primer vuelo de Tahiel en la Columna de Tahiel. No se lo pierdan!
Muchas gracias a todos por acompañarnos!
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