Consumo responsable y obsolescencia programada

En enero TVE emitió un documental acerca de la obsolescencia programada. Comprar – tirar – comprar explica a base de varios ejemplos como muchos productos de hoy en día se fabrican para durar un tiempo determinado para así asegurar que la demanda de este producto siga existiendo. De esta forma, si la publicidad no consigue generar un deseo por un producto más nuevo, entonces el diseño con caducidad asegurará la compra de un nuevo modelo.

El efecto de la publicidad ya es bastante conocido, y como minimalista aunque no soy inmune, por lo menos soy consciente del efecto y conozco algunos remedios. Reducir la exposición a la publicidad es una estrategia, la otra es mi curiosidad tremenda por saber de dónde vienen las cosas y mi preferencia por los productos de los cuales se puede comprobar su procedencia y sus componentes. Con la obsolescencia es más difícil ya que no soy yo quién decide cuando mi impresora deja de funcionar , o cuando mi vestido preferido se va a deshacer.

Pero sí te puedo dar algunas alternativas, para los productos más simples, es decir, los no-electrónicos.

Productos con fecha de caducidad: compra sólo lo que usas

Eso vale especialmente para los cosméticos. Generalmente tienen un año de validez, así que no vale la pena comprar cinco perfumes o 3 rímeles, si sabes que no los vas a terminar en un año. Mejor compra sólo lo que necesitas y cuando acabes con un perfume, compras el próximo, De esta manera evitas tener que tirar algo que no has aprovechado hasta el final.

Productos cosidos , cóselos de nuevo

En muchas ocasiones, el problema de las prendas de ropa no es que se rompan , o que pierdan color, o forma, sino que simplemente se les abren las costuras, y cuando ya los has llevado un tiempo, puede resultar difícil unirlo, ya que la prenda se ha ajustado a tu cuerpo (y ya no parece tan cuadrada como cuando la compraste). ¿La solución? Cuando dudo de la calidad de las costuras, paso por mi costurera del barrio antes de ponerlas a prueba , le pido que me las repase todas una segunda vez, y ¡voilá!: ya no se abrirán nunca más “sin mi permiso”.

Lo importante a la hora de comprar es la calidad

Los chollos de las tiendas de todo a 1 Euro no suelen durar mucho. Así que prefiero definir muy bien lo que necesito y después tomarme un tiempo para conseguir la solución perfecta y de mejor calidad. De esta manera me ahorro el dinero de comprar lo mismo varias veces yel tiempo de buscar lo mismo otra y otra vez.
¿Tienes otros trucos para burlarle a la obsolescencia programada?

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Foto: Jon Wiley / flickr

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