Controlar la ansiedad. 14 trucos

Mis vecinos me siguen dando por saco. Dia si y dia tambien…. La verdad es que estoy hasta las narices y el tema ya empieza ser preocupante cuando pierdo el sueño y me dan ataques de ansiedad… me da por comer dulce y ya sabemos todos que pasa con los dulces….

Buscando en internet maneras de desestresarme encontré algo en la página mejor con salud… pero no se yo si será efectivo

Lo pruebas y me cuentas…..

1. ¿Cómo podemos manejar el estrés?

En lugar de una actitud permanente de lucha contra nosotros mismos, o bien de huida, lo mejor es una respiración profunda activa.

Para calmarte y alcanzar un estado de serenidad puedes probar con alguna técnica de relajación.

2. Exponerse al miedo

La terapia de exposición consiste en exponer claramente las cosas que nos dan miedo. De esa forma conseguiremos más comodidad, por ejemplo, para hablar en público.

Seamos sinceros con nosotros mismos y tendremos una potente herramienta.

3. ¿Es el miedo lo que te está frenando?

Hay que reconocer cuándo nos estamos dejando vencer por una ansiedad exagerada. Y es que los miedos hacia algo pueden extenderse hacia otras cuestiones de nuestra vida.

Cuando nos enfrentemos a una situación o experiencia que nos parece difícil de abordar, reflexionemos.

Puede ser que los miedos tengan mucho que ver con esas limitaciones.

4. Hacer ejercicio para calmar el estrés diario

¿Sabías que la práctica de ejercicio es una de las mejores formas de relajarse? Al generar endorfinas, nos ayuda a calmarnos.

Además, potencia nuestro sistema inmunitario y eleva nuestra temperatura corporal.

5. Entendamos la ansiedad como excitación

La ansiedad no siempre es mala. En determinadas situaciones, difíciles en apariencia, debemos considerar la ansiedad como una especie de excitación, en lugar de como nerviosismo exagerado.

Un estudio ha confirmado que las personas que interpretan su ansiedad como excitación, en lugar de como nervios, tienen más probabilidades de actuar correctamente y salir airosos de las situaciones.

6. Es muy positivo reconocer las cosas que hacemos bien

Es preciso hacer una lista de lo que nos preocupa y otra lista de las cosas que nos van bien. Una vez las tengamos, procedemos a comparar.

De esta forma, no solo pensaremos en lo negativo, también en lo bueno que nos pasa. Puede ser que lo de la lista buena supere con creces a la lista de cosas negativas.

7. Hay que mirar las cosas en su conjunto

Nuestras alertas de supervivencia nos infunden temor y miedo permanente. Tenemos la sensación de que hay que tener la guardia siempre levantada.

Sin embargo, hemos de procurar controlar los mensajes de nuestra mente. Puede ser que nos avise de que algo malo podría suceder en el futuro. No obstante, no será en el momento actual, por lo que debemos relajarnos.

8. Tómate la vida como un juego

Tomarse las cosas con humor es tan importante como considerar las tareas como una especie de pasatiempo.

Para dominar el estrés tenemos que concebir cada acción como un juego. Cuando algo sale mal, podemos empezar la siguiente partida y probar de otra forma.

9. Los valores importantes

Antes de una situación desafiante, que nos pone muy tensos, volvamos a esos valores realmente fundamentales.

¿Qué es lo que más nos importa? ¿Nuestra familia, la pareja, hijos, o el aspecto laboral? Escribir lo que es importante para nosotros nos ayudará a afrontar retos aparentemente decisivos en nuestra vida.

10. Ayudar a los demás siempre nos aporta algo

Tenemos que mostrar nuestra predisposición para apoyar, escuchar y ofrecer nuestra ayuda. Cuando ayudamos a los demás tenemos menos emociones negativas y el estrés no nos afecta tanto.

11. Café para controlar el estrés

Según algunos estudios realizados al respecto, el café puede ser un excelente aliado en determinadas situaciones de estrés. 

No obstante, debemos tener en cuenta que para conseguir los objetivos deseados las cantidades deben ser moderadas.

12. La meditación es una excelente arma contra el estrés

Tenemos que entrenar nuestra mente para que se centre en el presente, en las tareas de cada día.

Con ello evitaremos las ansiedades sobre el futuro, y el tormento continuo con situaciones pasadas. Con la práctica, manejaremos nuestras depresiones, ansiedades y el dolor.

13. El diálogo con nosotros mismos

Un estudio llevado a cabo en 2014 con estudiantes demostró que el diálogo interno es mucho más importante de lo que pensamos.

Así, aquellos que utilizaron con más frecuencia el pronombre “tú” o su propio nombre, en lugar de “yo”, ganaron en autoconfianza.

Otra consecuencia directa fue que hablaron en público con menos problemas.

14. ¿Hasta qué punto es bueno o malo el estrés?

¿Es bueno el estrés? Algunos psicólogos dicen que es una señal de que nos importa nuestra vida y de que nos es significativa.

Además, pensar en los efectos positivos que nuestra acción puede aportar conseguirá que nuestras respuestas ante situaciones difíciles sean las adecuadas.

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