Reconozco que soy una fanática de "conjuntar" los diferentes elementos del look. Es cierto que las tendencias se van renovando y refrescando, por lo que ya no es, en absoluto, necesario pensar en que el bolso y los zapatos vayan "a juego". De hecho, hay combinaciones estupendas que tienen un toque muy natural precisamente porque rompen este aspecto estudiado y medido que aporta el haber escogido todo del mismo color o combinaciones muy ajustadas.
Pero en ocasiones, apostar por combinaciones de tonos coordinados pueden resolver un estilismo sabiendo que el acierto es seguro. En estos casos, con prisa, con necesidad de eficacia y poco tiempo, apostar por ajustar el tono de bolso y zapatos, nos despreocupa y nos asegura que acertamos.
Hay un recurso que resuelve esta situación con menos rigor: mezclar un estampado con algo liso. Hay que hacerlo cuando el conjunto de lo que llevas puesto es demasiado sobrio, porque si ya llevas estampados y dibujos en tu ropa, no vas a encontrar fácil que esta opción encaje bien.
Yo estos días estoy optando por elecciones muy minimalistas para la ropa que llevo, y estoy usando colores lisos, líneas simples y esa idea del "menos es más". En ocasiones esta filosofía me encanta y me hace sentir muy bien. Pero para no resultar tremendamente aburrida, he incorporado dibujos en los bolsos.
Os enseño dos ideas: verde-gris-negro y gris-blanco-rosa. A ver si os gustan.
Bolso:: Mustang (El Corte Inglés)Botines:: Camper
Bolso:: MISAKO
Botas:: ZARA