Robert Pattinson, es un muerto viviente como lo demuestra su trabajo en aquella saga de la que aún nos toca tragarnos la cuarta parte.
Y el Señor David Cronenberg a quien siempre tengo en consideración por el cuidado que toma a la hora de contar historias se ve que ahora ha optado por la vía rápida de: Tu me pagas por poner la cara y yo digo que he hecho esta caca.
Ni Paul Giamatti, ni Samantha Morton, ni Juliette Binoche logran darle un aliciente a esta "cosa" que no entretiene, ni educa, ni divierte, ni nada.
Una cinta llena de nada eso es Cosmopolis.