Si leyeron el post de la semana pasada, saben que estuve viajando por Nápoles, Pompeya y Capri. Viajar por Italia no es barato, y más cuando te acercás a la Costa Amalfitana.
Habíamos dejado el relato del viaje en Pompeya. Para ir de ahí a Sorrento, pueden tomarse un tren, la linea Circumvesuviana, y sale unos €2. Cerca de la estación de trenes de Pompeya hay un Carrefour que abre las 24 horas, si necesitan comprar provisiones. En Sorrento las cosas en el supermercado salen un 50% más caras, pero sigue siendo accesible.
¿Dónde conviene dormir en la Costa Amalfitana?
Decidimos hacer base en Sorrento por ser el lugar que ofrecía opciones a mejor precio, además de estar bien conectado con las otras ciudades. Nos alojamos en Londra, un hotel/hostel ubicado a unos 20 minutos caminando del centro de Sorrento y de la terminal. Para la zona el precio está bien (€31 la noche). La pieza es para 4 personas, con baño privado y el hotel tiene pileta y el recepcionista más buena onda. Otro hostel barato es Seven, pero hay que reservar con tiempo porque se llena rápido por la ubicación y el precio (€28 la noche con desayuno incluido).
Día 1 – Amalfi
Después de que dejamos las cosas en el hostel, arrancamos para Amalfi. Al frente de la terminal hay un puestito donde pueden comprar los pasajes de colectivo, y ahí mismo lo toman. También los pueden comprar a la vuelta de la terminal, en el bar. Compramos un pasaje por 24 horas que nos salió €10, con el que hicimos 5 viajes en total. Les recomiendo sentarse del lado derecho en la parte de atrás del colectivo para tener mejores vistas.
Ravello
Decidimos ir primero a Ravello, nombrada la Ciudad de la Música y la joya escondida de la Costa Amalfitana. Lo mejor de este lugar pacífico y encantador son las vistas. Hay 3 lugares a donde pueden ir para observar todo el paisaje: Villa Cimbrone (la más recomendada), Villa Rufolo, y el Jardín de la Princesa del Piamonte. Para los dos primeros hay que pagar entrada (€7). Mientras que las vistas desde el Jardín no son tan “espectaculares”, es gratis y es un buen lugar para almorzar. Por Via Roma hay un par de kioskos que hacen paninis baratos (€4). Si siguen caminando por esa misma calle hay una canilla para tomar agua.
Atrani
Nos tomamos el colectivo para bajar desde Ravello a Atrani, aunque también lo pueden hacer caminando. Es un de los pueblos más pequeños de la Costa Amalfitana. Es muy pintoresco y suele ser usado como locación para películas. Si tienen tiempo y ganas de caminar, recomiendo que recorran el pueblo. Nosotros fuimos directamente a la playa, nos pareció una de las más tranquilas y el agua es cristalina. Eso sí, hay que bajar bastantes escaleras para llegar, así que estén preparados. La playa tiene una parte pública y una privada, como casi todas. Como detalle, la parte pública tiene duchas gratuitas, así que es bastante completa.
Amalfi
Desde Atrani se puede caminar hasta Amalfi, lleva unos 5 minutos. Una vez ahí nos tomamos un helado y un café frío, ¡necesitábamos recuperarnos! Con las energías que nos quedaban caminamos por el pueblo, viendo los negocios y de ahí fuimos bajando hasta el puerto, desde donde se tiene una buena vista de toda la ciudad. Amalfi tiene un montón de calles chiquitas, como un laberinto, así que les recomiendo salirse un poco de la calle principal y recorrer los rincones.
Día 2 – Positano
El Sendero de los dioses
Este día fue el más largo de todos. Nos levantamos a las 5.30 am para poder tomar el primer colectivo a Amalfi. No, no nos equivocamos de destino. A donde queríamos ir en realidad es a Bomerano y para eso hay que combinar colectivos. En este pueblito de montaña está el inicio del Sendero de los dioses, más conocido como Sentiero degli dei o Path of the Gods.
Lleva unas 3 horas hacer este camino que termina, oficialmente, en Nocelle y realmente vale la pena. Una vez que llegan a Nocelle pueden seguir caminando hasta Positano, bajando por muchas escaleras, o tomar un colectivo. Recomiendo hacerlo de mañana así el sol no es tan intenso, y arrancando desde Bomerano para que el camino sea mayormente en bajada. Lleven agua y algo liviano para comer, protector solar, gorra y buen calzado.
Apenas terminan de bajar las escaleras está la playa Arienzo, que fue la que nos recomendaron por ser más tranquila. Después de la caminata por el Sendero de los dioses, realmente hace falta refrescarse, pero tengan en cuenta que también hay que seguir bajando escaleras para llegar a la playa. Llegué a pensar que iba a necesitar un par de rodillas nuevas después de este viaje.
Positano
Como el sol estaba muy fuerte después de un rato nos fuimos para Positano. Lleva unos 10 minutos caminando y el camino los lleva derecho. Ya desde que van llegando las vistas son increíbles, lo que uno tiene en mente cuando piensa en Positano. Si lo que quieren es sacar la foto típica de la Costa Amalfitana, tiene que ir al hotel Le Sirenuse, que tiene una de las mejores vistas. A nosotras nos dejaron pasar sin problema y había un montón de gente sacándose fotos también.
Camino a la playa pueden pasar por el centro y ver los negocios. Fuimos a Collina a tomar un café, el más caro de todo el viaje (€5). No tienen Wi-Fi y hay poco lugar para sentarse, pero recomiendo que prueben la granita de limón.
Al llegar a la playa, doblen a la izquierda sobre el camino de madera. Van a pasar por adentro de un bar y después continúa el camino. Esta parte es toda privada, pero no tiene mucho control, así que si son disimulados pueden entrar y pasar un rato ahí. Si no quieren preocuparse de que los agarren, pueden ir directamente al lado derecho que es público.
El día había sido eterno, así que decidimos volver temprano a Sorrento para cenar y descansar, pero la vista de Positano de noche es bellísima.
Día 3 – Sorrento
En realidad el relato de Sorrento empieza desde el día 1, ya que estábamos haciendo base ahí. Cuando volvimos de Amalfi, decidimos buscar algo de comida que no fuese pizza, o pasta, o carbohidrato en cualquiera de sus formas. Casi a punto de darnos por vencidas, encontramos Street Art Food Sorrento. Se pasaron con nosotras porque le pedimos cosas que no estaban en el menú y aún así lo prepararon. A mí me armaron un plato de “contorni”, como guarniciones de verduras cocinadas de distintas formas por €5.
El segundo día después de volver de Positano estaba antojada de comida chatarra, así que fuimos a Bar Meeting. Sí, hay mejores lugares para comer, pero por el precio y la cantidad de opciones no se puede pedir más. Aprovechamos para recorrer un poco más el centro y fuimos en busca de un babà. En Nápoles los habíamos visto preparados en un vaso con crema, chocolate y frutas, y queríamos uno de esos. No encontramos por ninguna parte pero en una heladería del centro nos hicieron uno a pedido. Una bomba de ron y crema.
Ahora sí, finalmente, el día que recorrimos Sorrento
Como ya habíamos visto el centro, nos fuimos directamente hacia el Parque Villa Comunale, desde donde se puede ver toda la costa. Desde ahí se puede bajar a la playa, tanto caminando como en ascensor. Cerca del parque está la iglesia de San Antonino (leímos mal el nombre y pensamos que era San Antonio y le fuimos a pedir un novio).
Desde el parque se puede ir directo a Marina Grande, el camino te va llevando. Es una zona de la ciudad muy pintoresca y es a donde tienen que ir si quieren comer mariscos. Esperen precios un poco más elevados, pero van a tener la certeza de que los productos son frescos. Acá les voy a fallar porque no me acuerdo el nombre del lugar en donde comimos, ni aparece en Google Maps. Como referencia, queda al lado de la Trattoria Da Emilia. Es un lugar muy chiquito y nuevo, y hace más bien street food, pero la atención es excelente y la comida muy sabrosa.
El resto del día nos la pasamos en la pileta del hotel, reponíendonos de tanta caminata y calor. Para volver a Roma tomamos un colectivo con FlixBus que nos salió €12.
En estos tres días viajando por la Costa Amalfitana gasté unos €150 (€50 por día), con hospedaje, comida y transporte incluido. Muchas de las comidas eran picadas que armamos con cosas del supermercado, lo que abarata mucho los costos.
Viajar por la Costa Amalfitana puede ser caro. Todo depende de lo que uno quiera hacer, ver y comer, pero es posible recorrerla con poco dinero y aún así disfrutarla al máximo
Si quieren más información sobre algunos de los lugares por donde estuvimos dejen un comentario y estén atentos a los próximos posts.
Shamsi