Revista Cocina
Cualquier postre frío hecho con un cítrico resulta muy digestivo después de una copiosa comida. Incluso este que lleva nata, leche condensada y queso de untar; vamos, que es cualquier cosa menos ligero.
Se hace en menos de un minuto, sólo tenemos que tener en cuenta que a la hora de comerlo tiene que estar muy frío, así que debemos contar con el tiempo que tiene que estar en la nevera.
A la hora de servirlo podemos ponerle unos fideos de chocolate, un poco de nata montada, canela...pero es un extra, porque esta crema está muy rica y tiene mucho sabor por sí misma.
Es muy importante que los limones que vayamos a utilizar (al menos uno de ellos) tengan la piel gruesa para poder rallarla fácilmente. No es la primera vez que echo mano de los limones que tengo en la nevera y son de esos que tienen la piel tan fina que sudo para pelarlos sin llevarme la parte blanca de la piel.
Desde finales de octubre hasta principios de junio es la temporada de este fruto tan ácido aunque se encuentran en las fruterías durante todo el año.
INGREDIENTES:
Zumo de limón: 100 mililitros.Ralladura de un limón.Leche condensada: 390 gramos.Nata para montar: 110 gramos.Yogur de limón: 2 (250 gramos).Queso de untar: 290 gramos.
Valores nutricionales (por 100 gramos):Calorías: 220.Hidratos de carbono: 24 gramos.Grasas: 12 gramos.Proteínas: 5 gramos.
Precio (por 100 gramos): 0,77€.
ELABORACIÓN (tradicional):
Lavamos el limón que vayamos a rallar, lo secamos y rallamos la piel con cuidado de no rallar la parte blanca. Hacemos el zumo de limón.
Colocamos en la batidora todos los ingredientes y batimos hasta tener una crema.
Repartimos esta crema en vasos individuales y los llevamos a la nevera para comerlos muy fríos.
ELABORACIÓN (Thermomix):
Lavamos el limón que vayamos a rallar, lo secamos y lo pelamos con cuidado de no llevarnos la parte blanca de la piel.
Ponemos la piel en el vaso y la pulverizamos programando 30 segundos a velocidad progresiva 5-7-10.
Colocamos en el vaso el resto de los ingredientes y programamos 20 segundos, velocidad 5.
Repartimos el contenido en raciones individuales y lo metemos en la nevera para que esté muy frío cuando vayamos a comerlo.