Crisis en España y ¿nuevas elecciones?

Ante todos los graves problemas políticos en España, ha surgido una notícia positiva: tras el fallo de la Audiencia Nacional la semana pasada en el que se comprobaba que 29 oficiales de máximo nivel vinculados al corrupto Partido Popular eran culpables de delitos de corrupción, falsificación documental, sobornos y blanqueo de capitales, fueron sentenciados a muchos años de cárcel (que espero cumplan en su integridad, aunque lo dudo teniendo en cuenta el sistema judicial de risa en España). Sí se puede decir, sin duda alguna, que el PP es el partido más corrupto, caciquil y delictivo en toda la historia de España. El conocido “Caso Gürtel” es el escándalo de corrupción más grande desde la etapa franquista.

El pasado viernes, el PSOE dirigido por ese hombre que parece vendedor del Corte Inglés, Pedro Sánchez, anunció la moción de censura para sustituir a Marrano Rajoy y así impedir unas elecciones generales que pueda agudizar la profunda crisis social y económica española.

Vamos a dejar claro que el cinismo del PSOE no tiene límites. El caso Gürtel no es nada nuevo (ya lleva una década a vista del público español) y casi todos los sospechosos fueron a juicio en el 2016. Mientras todo aquello, el PSOE encubrió los crímenes del PP, manteniéndolo en el poder y apoyó las brutales y antidemocráticas medidas de austeridad y el asalto fascista contra la Catalunya.

El apoyo del PSOE al PP también fue sostenido por el partido pseudo-izquierdista de Podemos, dirigido por ese aburguesado de coleta piojosa, Pablo Iglesias…el mismo que acaba de comprarse el macro chalet en la Sierra pepera de Madrid. Podemos, el mismo partido que reprime cualquier levantamiento independiente de la clase obrera para conseguir su “alianza” con el PSOE. De hecho, ayer Pablo Iglesias ha ofrecido su apoyo INCONDICIONAL, sí, INCONDICIONAL, al PSOE. No ignoremos tampoco, como ya he dicho, que el mismo Podemos hizo una llamada para aliarse directamente con el ultraderechista españolista “Ciudadanos”. Por su parte, C’s no quiere un gobierno del PSOE. Quiere elecciones para que sean ellos los que gobiernen.

Con excepción de los medios abiertamente peperos como el ABC y La Razón, casi toda la prensa española ha querido elecciones para sustituir al PP con un reemplazo derechista como C’s. Una de las cosas más positivas de los últimos años en España es que cada vez más mueren los votantes del PP: gente muy mayor y a menudo, ignorante o analfabeta. En caso contrario, susele ser gente acomodada que depende de la corrupción pepera para sostener sus privilegios. Prácticamente toda la prensa además arremete contra los catalanes y el “nacionalismo periférico”. Han cerrado filas a favor del nacionalismo español centralista de Madrid y la austeridad impuesta antidemocráticamente por Europa.

El partido neoliberal Ciudadanos ha sido alentado y alimentado por la prensa española, convirtiéndole en uno de los principales partidos desde su origen como un partiducho anticatalán. A Ciudadanos se le percibe como el partido más dispuesto a utilizar cualquier método posible para reprimir a la clase obrera, impedir la libertad de los catalanes en sus deseos de autonomía y seguir imponiendo las reformas neoliberales del estado español, en manos de Bruselas (no elegida por nadie).

Todas las elecciones en España desde el 2015 produjeron gobiernos sin mayoría. Esta inestablidad es típica de la destrucción de confianza en el sistema que imperaba desde la posguerra – el sistema bipartidista capitalista y burgués muere y agoniza.

El caso Gürtel ha abierta más la herida entre la ya de por sí tremenda brecha de clases en España. Después de Grecia, España es el país de la Europa occidental donde la crisis financiera y la austeridad han producido la devastación más grande de la historia moderna. Se habla de una “recuperación” económica basada en sueldos propios de Guinea, petróleo relativamente barato, un euro débil…pero el capitalismo español está moribundo. España tiene más de cinco millones de seres humanos viviendo en la más absoluta miseria y precariedad, pobreza infantil, paro y muchísima inestabilidad laboral (cuando no paro).

La criminal y maldita Comisión europea ha apoyado las medidas de austericidio en España…pero incluso ellos han hablado de una situación “crítica” en el país…y de deterioro evidente. El 20% de los sueldos principales ganan más de 6 veces más que el 20% de la escala más baja, poniendo a España al nivel de Bulgaria, Lituania o Grecia y casi toda Latinoamérica y África. Sin embargo, los españoles más ricos vieron sus ingresos disparar un 45% desde la crisis del 2008 a un 53% en el 2014, según datos del propio Banco de España.

Esas condiciones tan tremendamente injustas están produciendo una gran oposición social. En el 2017, el número de días laborales perdidos en disputas laborales aumentó un 53%. Se espera un verano caliente en Españistán.

¿Qué podría ocurrir a partir de mañana? Hay que entender que España no es Italia – es decir, España es un país más esclavo que Italia y por lo tanto, ninguna de las 3 posibilidades de gobierno va a romer con el “establishment” eurócrata financiero. Los españoles, como pueblo, “respetan” mucho la fuerza mayor y tienen como característica, ser sumisos. España es el pueblo más vasallo de Europa…desde que la Inquisición católica liquidó, exterminó, sus mentes más brillantes.

Pedro Sanchez solo tiene 84 diputados en un Congreso de 350 caciques. Su “alianza” será con Podemos y con los catalanes que hace 6 meses querían la independencia. Podemos ya ha dicho que no apoyaría, posiblemente, los presupuestos que Sánchez promete mantener. No veo viable esa “coalición” que se avecina. No va a durar mucho. Si hay elecciones, es posible que habría una mezcla de poder entre Ciudadanos, PP y el PSOE. Con Rajoy fuera, será más fácil forjar un consenso sobre cómo gobernar a los esclavos españoles.

En todo caso, hayan elecciones o no, no hay nada ahora en España digno de apoyar ni hay razones para ser optimista. Ya lo dijo muy bien la ex-Reina Sofía: “todo seguirá igual”. España no cambia para mejor.