Crítica #16: amigos de más (contiene spoilers)

Amigos de más ha supuesto otra oportunidad para Daniel Radcliffe de quitarse a Harry Potter de encima después de La mujer de negro, aunque siempre llevaremos al mago en nuestros corazones. Esta película muestra un ambiente romántico distinto, en plan: ¿quién va dar el primer paso en este amor predestinado?
Daniel Radcliffe (Wallace) junto a su compañera de reparto, Zoe Kazan (Chantry), son dos amigos que enamorados el uno del otro intentarán no ser más que amigos, evitando, aguantando las ganas,... pero todos sabemos que el amor no tiene rival. El personaje de Wallace nos ofrece un chico inteligente pero no demasiado listillo y con su punto justo de ironía, gracia y romanticismo, es decir, el novio perfecto, mientras que Chantry muestra a una chica insegura pero igual de inteligente, irónica, graciosa y romántica que Wallace, por lo que son 100% compatibles, en cristiano, son la media naranja de ambos.
En el largometraje también se puede disfrutar de la participación de Adam Driver, que conoceréis por Girls y Mackenzie Davis, que aunque no lo parezca son una parte importante de la cinta, ya que son por decirlo de alguna manera como la comedia de fondo, que aporta más risas al argumento.
Finalmente, el amor se impone y después de dejar atrás todo lo que les importa Wallace y Chantry se casan. En general Amigos de más es una comedia refrescante, llena de alegría y escenas graciosas que hacen que ésta sea muy recomendable para los adolescentes.
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