CUANDO TE ENCUENTRE
Título Original: The Lucky One Director: Scott Hicks Guión: Will Fetters Música: Hal Lindes Fotografía: Alar Kivilo Interpretes: Zac Efron, Blythe Danner, Taylor Schilling, Riley Thomas Stewart, Jay R. Ferguson, Adam LeFevre, Robert Hayes, Joe Chrest Distribuidora: Warner Fecha de Estreno: 25/05/2012
PERROFLAUTA IN LOVE
¡Qué sencillo es hacer una película romántica! Un buen casting, una historia que no peque demasiado de ridícula y hacer todo muy bonito, si encimas coges y adaptas a Nicholas Sparks no te hace falta ni pensar que es lo que quieres contar. Si todo es tan sencillo y sale tan bien, desde la fabulosa El Diario de Noa hasta incluso La última Canción, aquella con un Greg Kinnear moribundo y una Miley Cyrus echándole el lazo al hermano pequeño de Thor, ¿Por qué el señor Scott Hicks, otrora director de la brillante Shine (capten el chiste), es capaz de marcarse un truño como éste? Lo único que había que hacer es seguir el manual, pero parece que han decidido ir a contracorriente, tomando siempre las peores decisiones posibles para la película, algo que se empieza a ser visible desde su comienzo con algunas de las que posiblemente sean las peores escenas de guerra jamás filmadas, aunque no voy a negar que ver a Efron mover los mofletes a cámara lenta tiene su gracia.
La película cuenta la historia de un hippy marine americano que un buen día en medio de la guerra encuentra la foto de una mujer, y cuando va a cogerla explota una bomba junto a su pelotón salvándole así la vida. De vuelta a casa el héroe americano decide ir a buscar a su ángel de la guarda, pero cuando llega junto a ella no se atreverá a contarle la verdad, y como buen hippy trabajará en su granja adiestrando perros hasta ganar su amor a base de galantería. Ella además tiene un hijo de un matrimonio fracasado con un sheriff cabrón y algo acosador, que rápidamente congeniará a la perfección con el héroe y le acogerá como el padre que realmente le valoré.
Son muchos y demasiados obvios todos los baches con los que se encuentra la película, el primero reside en un Zac Efron, por el que un servidor siente especialmente simpatía, y con él que al tenerlo en tu reparto te aseguras un par de cosas, lo primero que será el único actor que parezca más bella que su compañera de reparto y además que con su cara de niño jamás ha pasado un mal trago en la vida, por lo que resulta totalmente inverosímil verle en el papel de un soldado traumatizado. Además su química con Taylor Schilling es totalmente inexistente, simplemente no congenian y resulta increíble creértelos como una pareja real, parece que ambos están actuando en películas distintas. Por mucho que los dos intenten sacar sus personajes hacia adelante, es imposible hacer que funcionen… ¿En qué diantres estaban pensando los directores de casting?
Su imperiosa necesidad de resultar bonita me agobia en exceso, siempre buscando ese toque sureño y otoñal que tenían las series de WB de los 90, pero acercándose más a dar la sensación de ser un telefilme de sobremesa excesivamente almibarado que contagiándose lo más mínimo de la nostalgia que hoy día generan Dawson Crece o Las Chicas Gilmore. Pero lo peor de todo es la continua sensación de que realmente no hay nada que el director te quiera contar, más allá de la suma de unas cuantas líneas de guión bastante estúpidos, unos bonitos besos en primer plano muy románticos, y un final poco sorprendente y que ni siquiera ayuda a que si para esas alturas aún queda algún espectador entregado a la película sea capaz de emocionarse.
En español la película se llama “Cuando te encuentre” pero la encuentra nada más pasar el prólogo, no sé en qué estaría pensando el traductor y si no sería más lógico haberla llamado “Al encontrarte”, pero aún así me queda la sensación de que si la película hubiera sido más fiel a lo que su título español indica y nos hubiera contado la historia de cómo este hippy perroflauta se pega un gran pateo en busca de una mujer de la que sólo conoce su rostro las sensaciones hubieran sido otras que las que esta pastelosa, ridícula y manida película acaba por dejar, y es que ni siquiera es capaz de sentirse emotiva para un chico como yo, que ya sabéis que soy un romántico.