Si echamos la vista atrás, la séptima temporada acabó con la huida de la justicia de Brennan con la pequeña Christine, dejando a Booth sólo (¿quién le haría eso al guapo de Booth?). Esta octava temporada empieza con todo el equipo intentando adaptarse a las nuevas condiciones del laboratorio (nuevo antropólogo con nuevas normas que no gustan demasiado), e intentando conseguir todas las pruebas necesarias para exculpar a Brennan del asesinato de Izan Sawyer, un amigo suyo, del que la acusan por culpa del hacker Pellant quien había creado falsos vídeos para que toda la culpa cayera sobre ella. También nos encontramos con un Booth rebelde, desplazado de su puesto de agente especial, que cansado, de decir que no sabe donde está Huesos, desobedece a sus superiores una y otra vez.
La aparición del cadáver de una mujer que tenía relación con Pellant en su juventud, hace que todo el equipo se plantee que Brennan tiene algo que ver con la aparición de los huesos. Además el descubrimiento de que Ángela ha estado comunicándose con Temperance durante los tres meses que lleva en busca y captura hace a todos enloquecer, sobre todo a Booth, como es normal. Todo el equipo se pone de inmediato manos a la obra para descubrir qué le ocurrió a la misteriosa mujer.
No pasa mucho tiempo hasta el encuentro un tanto agresivo y apasionado de Booth y Brennan, con su look de fugitiva compuesto por una horrible peluca rubia, que le desfavorece bastante (a mí personalmente me parece que lleva un peinado de vieja).Algo que me impresionó fue descubrir el lado oscuro de Hodgins cuando éste intenta matar a Pellant estrangulándolo en un cementerio (no sin razón, por supuesto). Hodgins había sido enviado por Ángela a dejar unas flores en una tumba, que era el método que habían estado usando ella y Brennan para comunicarse durante los tres meses que Temperance llevaba fuera, y el hacker se acerca a él en una actitud provocadora (pidiendo a gritos que al menos le diera, al menos, un tortazo). En realidad veo normal la reacción de Hodgins, Pellant se lo merece por ser tan puñetero (por no usar otra palabra). También me ha gustado mucho el comportamiento de Cam durante todo el capítulo, que a pesar de seguir ejerciendo como dura jefa, siempre hace todo lo posible (incluso la vemos actuar como una conspiradora más) para que Brennan pueda volver, y el papel de Max, que va de protector de su hija y es un "malote".Todos se centran en averiguar si fue Pellant quien mato a la mujer para poder librarse de él y poder meterlo de una vez por todas a la cárcel y conspiran y hacen cosas tan poco sospechosas como echar a los guardias de seguridad del laboratorio (cosa que creo que hace que la trama pierda bastante credibilidad porque no creo que en un laboratorio de ese prestigio se pueda echar a todos los guardias así sin más), para que Temperance pueda ir a examinar los huesos en persona. Ahí hay otra escena muy emotiva, aunque corta, que es el reencuentro entre Ángela y Brennan.Al fin, entre todos, como buen equipo, consiguen las pruebas necesarias para culpar a Pellant, y exculpar a Brennan. Parece que todo vuelve a la normalidad, pero cuando Brennan (ya sin la horrenda peluca rubia) está disculpándose con Booth
Para concluir, no me queda más que decir que creo que este capítulo ha mejorado bastante la temporada pasada, porque a pesar de que al fin pudimos ver a Booth y Huesos juntos, a mí me pareció más bien flojilla… Espero que los próximos capítulos sigan la línea que ha marcado este, porque la cosa está interesante.
Doralicia (@doralais)