Revista Cultura y Ocio

Crítica: Ni de Eva ni de Adán. Amélie Nothomb.

Publicado el 02 febrero 2015 por Metgaladriel @metgaladriel
Crítica: Ni de Eva ni de Adán. Amélie Nothomb.
NI DE EVA NI DE ADÁNAmélie NothombEditorial Anagrama
Hablar de Amélie Nothomb es hablar de Japón. Los que me conocen saben que adoro el país asiático, aunque no en el sentido otaku de fan absoluta, sino que me gusta mucho su cultura, su forma de ser y su manera de ver el mundo, así de sencillo. Por tanto, tenía que hablar de Amélie Nothomb.
Ni de Eva ni de Adán estaba en mi lista de libros pendientes desde hace mucho tiempo y, a pesar de haber leído reseñas que ponían el libro en las nubes y otras que lo arrastraban por los suelos, decidí formarme mi propia opinión. Ahorré un poquito y fui a comprármelo (ahorré bastante para comprarme más libros y no echar el viaje hasta la tienda en balde, como se dice por mi tierra).
Hablar de Amélie Nothomb es hablar de su vida pues esta autora nació en Kobe (Japón), hija de un matrimonio belga. Pasó su infancia y adolescencia en Japón y en China donde su padre fue embajador. Así que nadie mejor que ella para hablar de la cultura asiática desde su visión europea.
Ni de Eva ni de Adán muestra una parte de la vida de su autora que se erige como protagonista. Amélie está decidida a perfeccionar su japonés así que intercambia clases de este idioma por clases de francés. Así es como conoce a Rinri, su alumno, que la transportará hacía una preciosa historia de amor a través de Hiroshima o el ascenso espiritual al monte Fuji. 
Elegir Ni de Eva ni de Adán como primera lectura de esta autora ha sido un acierto. Su forma de escribir es tan directa y culta que te traspasa. Gran parte de sus diálogos y escenas resuenan de forma placentera aún en mi memoria. Lo mejor, sin duda, un final que se nutre de toda la experiencia vertida en la obra. 
Ni de Eva ni de Adán es una novela breve, muy emotiva y apasionada que se convertirá en una delicia para los amantes de Japón, de la autora o de los que desean un libro que les llegue muy adentro.

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