Crónicas del Campo Santo Nº 37

Crónicas del Campo Santo Nº 37

Crónica escatológica

Los pedos que sueltan, al día de la fecha, eso quiero comentar en esta ocasión, nuestros pinchitos ¡son prodigiosos!, huelen a... ¿gorila?, ¿chimpancé? ¿a qué...? Es algo infame; algunos son estratosféricos. Confío en que suban hasta allá arriba, y se pierdan entre las nubes.

Es estar en la taberna, tomando un vino, y entrar un pinchito, soltando lo que no está escrito (por nuestro bien) y salir todos los parroquianos corriendo a la calle. ¡A fumar! Aunque sea un farias.

Que no tenemos mascarillas especiales antibichitos como las que tienen los héroes de la U.M.E.

Lo de los ojos rojos tiene un pase, ¿quién no se ha pasado un fin de semana un tanto loco? Pues eso.

¡¡Pero esos pedos!! Que yo no soy Orzowei, mecachis en diez. Los rinocerontes huelen mejor.

Les cuento: iba yo hace unos días en un autobús urbano, subió un pinchito, y se tiró un cuesco... ¡supernova! Me tuve que bajar en la siguiente parada para no fenecer en el transporte.

Esto va a ir a más, amigos mutados; acostúmbrense a comer yogurt y kéfir artesanales, y los normales a salir corriendo cuando un pinchito comience a pedorrearse. Ignoro qué es lo que comen, pero de lo que sueltan...

No quisiera ver sus deposiciones, de todos los colores, pero es que... ¡huelen a mono! Cojones.

¿Inmunizados?

Inmune es lo que sueltan por el... tubo de escape.

Houston: tenemos un problema.

Tomar yogurt y kéfir, que yo os quiero mucho mis amigos MING´s. El yogurt de leche de cabra os aportará un "toque especial" en el momento crucial de deponer lo mejor de vosotros mismos.

Esto último es un ruego especial de las camareras del barrio, que tienen que entrar en los váteres a limpiar la guarrada innombrable que dejáis a vuestro paso. Y para los varones aún rampantes (y a mayores puteros) un pedido rogatorio: mear sentados en la taza, cabrones. Que no sois capaces de acertar en la taza y lo dejáis todo perdido.

Ya no acertáis, lo comprendo, se os ha subido a la cabeza el "producto", y menos que acertaréis según vayan pasando los meses. Hacerlo sentados en la taza, ¡estáis inmunizados! ¿Qué podéis pillar? Y así no enguarraréis el rincón del trono, mongolos.

Sigue habiendo mala gente (o tontos del culo) haciendo cosas infames a la humanidad, escondidos tras la capa de miedo e ignorancia que recubre Terra Mare en estos eventos. Una guerra soterrada, utilizando armas biológicas y muy malas artes (tecnologías novedosas) para hacerse o continuar con el control de este planetilla ignorado.

Esto es algo que viene de muy lejos (de antes del Diluvio Universal) y no debería sorprendernos en nada. En especial a los veteranos que hicimos el servicio militar obligatorio.

Es posible que abra una nueva línea de artículos, chocantes, para que dialogemos sobre... otras miradas y los eventos actuales.

Luminosos deseos.

Daniel Paniagua Díez