Erotismo, fotos vintage, pasatiempos infantiles, derechos sociales,... La Galería Raquel Ponce invitó a indagar a un comisario, Tolo Cañellas, sobre la obra de un artista norteamericano inédito en el mercado español, Dean Sameshima.
El resultado es la exposición "Cruise or be cruised (Madrid)". Un cruce de belleza, sentimiento, nostalgia y, cómo no, de lucha. La muestra se completa con una reconstrucción del estudio del artista a modo de moderna "pop-up store" con souvenirs. Con este proyecto, la galería madrileña inaugura la temporada 2012-2013 a finales de septiembre.
En "Cruise or be cruised (Madrid)" nos hallamos ante una serie de fotografías relacionadas con esa búsqueda constante de material. En la muestra hay piezas, como negativos "vintage" auténticos de revistas eróticas –como "Physique Pictorial"–, que él reencuadra confiriéndoles un sentido totalmente distinto al original, mucho más poético. Pero también imágenes refotografiadas y retocadas manual o digitalmente, que dan como resultado obras propias cargadas de sentimiento.
Utilizando como inspiración la paleta cromática del "Hanky Code" o "código de pañuelos" –un lenguaje no verbal muy popular en esos años para dar a conocer los gustos sexuales de cada uno–, el artista realiza serigrafías inspiradas en los típicos pasatiempos de "unir los puntos" que tienen como resultado la aparición de un dibujo. En la muestra solo pueden verse los puntos y los números, sin quedar al descubierto el dibujo en cuestión. Se obtiene así una obra abstracta y codificada, donde realmente nunca sabemos qué dibujo (erótico) se esconde. El espacio galerístico queda convertido en una suerte de "une los puntos" tridimensional, donde cada uno puede seguir el orden que prefiera.