
Es claro que el cambio en el sonido del último álbum de los neoyorkinos vino por la inercia lograda después de éste disco. Y este pensamiento lo afianzo al escuchar el trabajo solista de sus compañeros, que no esta nada mal tampoco, pero que se encuadra mucho más con el camino trazado por su banda madre.
Quizás la elección del primer corte no haya sido la acertada, a mi parecer. No creo que "11th Dimension" represente correctamente al disco; pero buéh. Eso le pasa a Julian por no llamarme.
Éste muchacho, sin embargo, se despachó con un álbum de rock-pop de tintes futuristas, cargado con guiños a los 80´s, y melodías que dejan en claro quién comanda esa área en su banda; todo apoyado por paredes de teclados y guitarras al servicio de esa voz arrastrada y engañosa, que funciona como perfecto hilo conductor de los sentimientos (en su mayoría) oscuros que cuentan las letras.
En "Phrazes for the Young" Casablancas se larga de lleno a jugar. Y la tapa deja en claro que el pibe se puso el disco al hombro como verdadero solista; solo, solito, solari.
Demás esta decir: a buscar,comprar y/o bajar.
Hay mucho para destacar; pero acá les dejo tres temas como aperitivo.
Arrancamos por el final, "Tourist", "...Feel like a tourist in the big city / soon I will simply evaporate...":
Ahora "River of Brakelights", "...In the afterlife of supercities, gravity devouring it's outskirts / It's me all in octopus arms, redecorating late at night...". La canción más dramática del álbum; cuando lleguen al estribillo no van a querer que termine nunca:
Y me quiero dar el gustito de postear este simple y simpático tema llamado "4 Chords of the Apocalypse", canción sobre una relación que va hacia su final (o vaya a saber dónde); buena excusa para poder apreciar la voz de Casablancas, y lo cómoda que se mueve en otros terrenos no visitados por los Strokes: