Revista Cocina
Si much@s habéis pensado que hoy tocaba historia de Cuky...Estáis en lo cierto.Qué mejor día que hoy, que os traemos esta tarta de Pascua para contaros la historia de cómo Cuky aspiró a ser Tambor, el conejito de la peli de Bambi.
Sí. Entre las muchas profesiones que tuvo el chef, la de actor fue una de sus favoritas, (y de las más duraderas, que ya es decir). Aunque no llegase a ser conocido nunca por ningún papel protagonista, (ni secundario, ni de extra,...), Cuky recuerda con nostalgia los días en los que pisaba las calles de Hollywood como si fuesen calles hechas de chocolate. Calles donde podías darte de bruces con la suerte al doblar la esquina y encontrarte con un cazatalentos perruno... O con algún famosete.
Cuky llevaba poco en Hollywood cuando audicionó para el papel de "Tambor".Y os preguntaréis que qué hacía un perro aspirando al papel de Tambor, donde claramente, era un conejo...¿Lo tenían ya claro los guionistas?, ¿se improvisó sobre el momento?, ¿fue tan mala la prueba de Cuky como para que renunciasen a todos los perros general en la película?...Pues no, pero casi.La prueba era sencilla: Además de leer unas líneas del guión, el chef (por aquel entonces, aspirante a actor), debía dar los ya conocidos golpecitos en el suelo con la patita por los que tanto conocemos a Tambor. Y al chef eso se le daba de maravilla. De hecho, lo hacía como nadie...Sólo había alguien que lo hacía mejor que él y que encajaba a la perfección en el papel, y ese era el auténtico Tambor.
Cuky ya conocía a Tambor de anteriores audiciones (y películas, y series), y su admiración era total.Tanto era así que, en cuanto lo vio aparecer, se puso nervioso y olvidó todo lo que tenía que decir. Y no sólo eso, si no que se quedó patidifuso, incapaz totalmente de dar patatidas en el suelo. Ni de hablar siquiera.Fue su momento "fangirl" total.Y su única oportunidad de decirle a su ídolo que le admiraba.
Cuky se quedó sin papel y con las ganas de pedirle un autógrafo a Tambor.Pero no os preocupéis que, esta historia acaba con final feliz.Meses después, el chef y Tambor coincidieron en el estreno de la película "Bambi", (a la que Cuky no estaba invitado pero, en la que se coló por todo el morro).Fue entonces cuando el chef reunió el valor necesario para expresarle a su ídolo todo lo que sentía.El conejín, (que era tan amoroso como en la peli), sintió ternura por Cuky y no tardaron en hacerse grandes amigos.Hoy, después de años, aunque les separen miles de kilómetros, el chef y él siguen siendo uña y carne, y por eso hoy, le dedicamos esta tartita a Tamborcete.
Si amáis la tarta de zanahoria tanto como nosotros, os encantará esta receta que ha hecho el chef para la ocasión. Mega jugosa y tierna con el toque crujiente de las nueces <3
(Para un molde de 18 cm. Os puede servir también para uno de 20 o 21 cm. aunque os quedarán bizcochitos más bajos)
~450 grs. de zanahoria (pelada, lavada y picada)*~4 huevos L (ó 5 huevos M)
~200 ml. de aceite de oliva suave~50 ml. de leche entera~250 grs. de azúcar moreno~150 grs. de piña (con su jugo)
~350 grs. de harina de trigo común~1/2 cdta. de nuez moscada~1/2 cdta. de jengibre en polvo~1 y 1/2 de canela en polvo~2 cdtas. de levadura química (tipo Royal)~250 grs. de nueces troceadas~1/2 cdta. de sal
*Es importante que sean 400 grs. de zanahoria totales. No pesarlos antes de pelarlas, ya que, varía la cantidad final de zanahoria en la masa.~500 ml. de nata para montar (con al menos el 35,1% de materia grasa)
(Central Lechera Asturiana)~5 cucharadas de azúcar blanco~300 grs. de queso de untar (tipo Philadelfia)
~Fondant~Colorante rosa~Colorante negro~Palillos~Manga pastelera y boquilla de estrella (2D)~Goma Eva blanca y rosa~Mariposas de azúcar comestible
~1. Precalentamos el horno a 180º con calor arriba y abajo y preparamos nuestros moldes de 18 cm desmontables (o si tenéis uno, como nosotros, podéis dividir la masa en tres partes y reservar las otras dos en la nevera mientras se hace la primera, y así con el resto). Forraremos el fondo con papel vegetal y echaremos spray anti-adherente en todo el molde.
~2. Por un lado, tamizamos todos los ingredientes secos dos veces, y reservamos.
~3. A parte, batimos los huevos con el azúcar, unos 2-3 minutos, hasta que espumen y la mezcla quede homogénea.
~4. Sin dejar de batir, añadimos el aceite en hilo, batiendo a velocidad media. Batimos un par de minutos más mientras añadimos la leche.
~5. Seguidamente, añadimos los ingredientes secos, incorporándolos con unas varillas manuales para no batir en exceso. Revolveremos hasta que se integre todo bien.
~6. Picamos la zanahoria en un robot hasta que quede bien finita. Hacemos lo mismo con la piña, lo juntamos todo y lo añadimos a la masa removiendo ligeramente hasta que se incorpore.
~7. Picamos las nueces (podemos dejar trozos irregulares), y las añadimos a la mezcla, repartiéndolas bien.
~8. Ahora, si tenéis solo un molde, es el momento de dividir la masa en tres partes. Podéis pesar cada parte o podéis ir repartiéndola con una cuchara de helado (contando las cucharadas). En cualquier caso, las dos partes que no utilicemos en el momento, las guardaremos tapadas con papel film en la nevera.
~9. Horneamos el primer bizcocho a 170º con calor arriba y abajo, durante 25-27 minutos, o hasta que al pinchar con un palillo éste salga seco.
~10. Sacamos el bizcocho y dejamos enfriar en el mismo molde sobre una rejilla 10 minutos antes de desmoldar. Desmoldamos y dejamos enfriar por completo sobre rejilla antes de envolver con papel film para que se asiente la miga y sea manipulable.
~11. Repetimos el proceso con las otras dos partes de masa, completando los tres bizcochos. Los dejaremos reposar al menos 2 horas para que asiente la miga, tapados con papel film (una vez que hayan enfríado por completo ya que, de lo contrario, se crearía condensación dentro del film y estropearía el bizcocho).
~12. Pasado este tiempo, es el momento de montar nuestra tarta.
~1. Batimos la nata que deberá estar muy fría (recién sacada de la nevera o metida previamente 10 minutos en el congelador). Antes de que empiece a coger cuerpo, añadimos el queso crema y seguimos batiendo.
~2. Cuando comience a coger cuerpo, empezaremos a añadir el azúcar en hilo y despacio, sin dejar de batir a velocidad media. Seguiremos batiendo hasta que la nata quede montada completamente y firme.El queso la ayudará a mantenerse para que no se derrita, aún así, es importante conservarla en nevera.
~3. Comenzaremos con el montaje poniendo un pegotito de nuestro relleno sobre la bandeja o plato donde queramos poner la tarta y pondremos el primer bizcocho encima, así se asentará y no se moverá. Rellenaremos poniendo una capa gruesa pero no demasiado, para que la tarta no se tambalee. Esta primera capa de crema (sobre el primer bizcocho), deberá tener las mismas cucharadas (si queréis medirlo así), de crema que la segunda (encima del segundo bizcocho), para que el corte quede homogéneo. Podéis ayudaros también con una cuchara de helado. Nosotros pusimos 5 cucharadas en cada capa. Alisamos y colocamos el último bizcocho.
~4. Cuando tengamos nuestro 3º bizcocho colocado, cubriremos la tarta por completo con la crema (ahora cobertura), con una capa muy fina que tan sólo cubrirá ligeramente los bizcochos, y meteremos en la nevera media hora, para que se asiente.
~5. Sacamos la tarta y cubrimos con una segunda capa de crema, esta vez más espesa. Ya taparemos todos los bizcochos por completo.Podéis repetir el proceso dándole una tercera capa, como hemos hecho nosotros. Con estas cantidades que os proporcionamos, os da de sobra. Así, tendréis una capita gorda de crema con cada trocito de tarta. A nosotros nos encanta ;)Recordad dejarla media hora en la nevera antes de cada capa y sobre todo, antes de empezar con la decoración de fondant que le pondremos.
~Para la decoración, dejaremos enfriar la tarta en la nevera mientras preparamos el fondant y las orejitas.
~Orejitas: Utilizamos goma eva blanca (con purpurina) y rosa (sin ella), cortando unas orejitas a mano alzada (no hemos utilizado plantilla pero vosotros, podéis imprimir una si os resulta más fácil).
~Ojos: Utilizamos goma eva dorada con purpurina. Lo mismo, dibujamos y cortamos sobre la goma eva sobra la marcha, intentando que queden iguales.
~Nariz, mofletitos, patitas y bolitas del pelo: Fondant y colorante rosa.
~Bigotitos: Palillos teñidos con colorante negro.
~Pelito: Más cremita de la cobertura, decorando con manga pastelera y boquilla 2D.
¿Os contamos un secreto?.
Tambor vino a merendar con nosotros esta rica tarta de zanahoria...¡¡Y se llevó un trocito para el viaje de vuelta!!.
Os podemos asegurar que este CarrotCake obra maestra del chef, se ha ido directo a nuestro TOP 3 de tartas favoritas. Aunque denso, es muuuy esponjoso, jugoso y ese toque de nueces ummm... Si os gusta la tarta de zanahoria tanto como a nosotros, ¡os encantará ésta! =)
Sed felices dulceros.
¡¡Abrazo de ose...conejito!!
Honey Kiss.
Sí. Entre las muchas profesiones que tuvo el chef, la de actor fue una de sus favoritas, (y de las más duraderas, que ya es decir). Aunque no llegase a ser conocido nunca por ningún papel protagonista, (ni secundario, ni de extra,...), Cuky recuerda con nostalgia los días en los que pisaba las calles de Hollywood como si fuesen calles hechas de chocolate. Calles donde podías darte de bruces con la suerte al doblar la esquina y encontrarte con un cazatalentos perruno... O con algún famosete.
Cuky llevaba poco en Hollywood cuando audicionó para el papel de "Tambor".Y os preguntaréis que qué hacía un perro aspirando al papel de Tambor, donde claramente, era un conejo...¿Lo tenían ya claro los guionistas?, ¿se improvisó sobre el momento?, ¿fue tan mala la prueba de Cuky como para que renunciasen a todos los perros general en la película?...Pues no, pero casi.La prueba era sencilla: Además de leer unas líneas del guión, el chef (por aquel entonces, aspirante a actor), debía dar los ya conocidos golpecitos en el suelo con la patita por los que tanto conocemos a Tambor. Y al chef eso se le daba de maravilla. De hecho, lo hacía como nadie...Sólo había alguien que lo hacía mejor que él y que encajaba a la perfección en el papel, y ese era el auténtico Tambor.
Cuky ya conocía a Tambor de anteriores audiciones (y películas, y series), y su admiración era total.Tanto era así que, en cuanto lo vio aparecer, se puso nervioso y olvidó todo lo que tenía que decir. Y no sólo eso, si no que se quedó patidifuso, incapaz totalmente de dar patatidas en el suelo. Ni de hablar siquiera.Fue su momento "fangirl" total.Y su única oportunidad de decirle a su ídolo que le admiraba.
Cuky se quedó sin papel y con las ganas de pedirle un autógrafo a Tambor.Pero no os preocupéis que, esta historia acaba con final feliz.Meses después, el chef y Tambor coincidieron en el estreno de la película "Bambi", (a la que Cuky no estaba invitado pero, en la que se coló por todo el morro).Fue entonces cuando el chef reunió el valor necesario para expresarle a su ídolo todo lo que sentía.El conejín, (que era tan amoroso como en la peli), sintió ternura por Cuky y no tardaron en hacerse grandes amigos.Hoy, después de años, aunque les separen miles de kilómetros, el chef y él siguen siendo uña y carne, y por eso hoy, le dedicamos esta tartita a Tamborcete.
Si amáis la tarta de zanahoria tanto como nosotros, os encantará esta receta que ha hecho el chef para la ocasión. Mega jugosa y tierna con el toque crujiente de las nueces <3
(Para un molde de 18 cm. Os puede servir también para uno de 20 o 21 cm. aunque os quedarán bizcochitos más bajos)
~450 grs. de zanahoria (pelada, lavada y picada)*~4 huevos L (ó 5 huevos M)
~200 ml. de aceite de oliva suave~50 ml. de leche entera~250 grs. de azúcar moreno~150 grs. de piña (con su jugo)
~350 grs. de harina de trigo común~1/2 cdta. de nuez moscada~1/2 cdta. de jengibre en polvo~1 y 1/2 de canela en polvo~2 cdtas. de levadura química (tipo Royal)~250 grs. de nueces troceadas~1/2 cdta. de sal
*Es importante que sean 400 grs. de zanahoria totales. No pesarlos antes de pelarlas, ya que, varía la cantidad final de zanahoria en la masa.~500 ml. de nata para montar (con al menos el 35,1% de materia grasa)
(Central Lechera Asturiana)~5 cucharadas de azúcar blanco~300 grs. de queso de untar (tipo Philadelfia)
~Fondant~Colorante rosa~Colorante negro~Palillos~Manga pastelera y boquilla de estrella (2D)~Goma Eva blanca y rosa~Mariposas de azúcar comestible
~1. Precalentamos el horno a 180º con calor arriba y abajo y preparamos nuestros moldes de 18 cm desmontables (o si tenéis uno, como nosotros, podéis dividir la masa en tres partes y reservar las otras dos en la nevera mientras se hace la primera, y así con el resto). Forraremos el fondo con papel vegetal y echaremos spray anti-adherente en todo el molde.
~2. Por un lado, tamizamos todos los ingredientes secos dos veces, y reservamos.
~3. A parte, batimos los huevos con el azúcar, unos 2-3 minutos, hasta que espumen y la mezcla quede homogénea.
~4. Sin dejar de batir, añadimos el aceite en hilo, batiendo a velocidad media. Batimos un par de minutos más mientras añadimos la leche.
~5. Seguidamente, añadimos los ingredientes secos, incorporándolos con unas varillas manuales para no batir en exceso. Revolveremos hasta que se integre todo bien.
~6. Picamos la zanahoria en un robot hasta que quede bien finita. Hacemos lo mismo con la piña, lo juntamos todo y lo añadimos a la masa removiendo ligeramente hasta que se incorpore.
~7. Picamos las nueces (podemos dejar trozos irregulares), y las añadimos a la mezcla, repartiéndolas bien.
~8. Ahora, si tenéis solo un molde, es el momento de dividir la masa en tres partes. Podéis pesar cada parte o podéis ir repartiéndola con una cuchara de helado (contando las cucharadas). En cualquier caso, las dos partes que no utilicemos en el momento, las guardaremos tapadas con papel film en la nevera.
~9. Horneamos el primer bizcocho a 170º con calor arriba y abajo, durante 25-27 minutos, o hasta que al pinchar con un palillo éste salga seco.
~10. Sacamos el bizcocho y dejamos enfriar en el mismo molde sobre una rejilla 10 minutos antes de desmoldar. Desmoldamos y dejamos enfriar por completo sobre rejilla antes de envolver con papel film para que se asiente la miga y sea manipulable.
~11. Repetimos el proceso con las otras dos partes de masa, completando los tres bizcochos. Los dejaremos reposar al menos 2 horas para que asiente la miga, tapados con papel film (una vez que hayan enfríado por completo ya que, de lo contrario, se crearía condensación dentro del film y estropearía el bizcocho).
~12. Pasado este tiempo, es el momento de montar nuestra tarta.
~1. Batimos la nata que deberá estar muy fría (recién sacada de la nevera o metida previamente 10 minutos en el congelador). Antes de que empiece a coger cuerpo, añadimos el queso crema y seguimos batiendo.
~2. Cuando comience a coger cuerpo, empezaremos a añadir el azúcar en hilo y despacio, sin dejar de batir a velocidad media. Seguiremos batiendo hasta que la nata quede montada completamente y firme.El queso la ayudará a mantenerse para que no se derrita, aún así, es importante conservarla en nevera.
~3. Comenzaremos con el montaje poniendo un pegotito de nuestro relleno sobre la bandeja o plato donde queramos poner la tarta y pondremos el primer bizcocho encima, así se asentará y no se moverá. Rellenaremos poniendo una capa gruesa pero no demasiado, para que la tarta no se tambalee. Esta primera capa de crema (sobre el primer bizcocho), deberá tener las mismas cucharadas (si queréis medirlo así), de crema que la segunda (encima del segundo bizcocho), para que el corte quede homogéneo. Podéis ayudaros también con una cuchara de helado. Nosotros pusimos 5 cucharadas en cada capa. Alisamos y colocamos el último bizcocho.
~4. Cuando tengamos nuestro 3º bizcocho colocado, cubriremos la tarta por completo con la crema (ahora cobertura), con una capa muy fina que tan sólo cubrirá ligeramente los bizcochos, y meteremos en la nevera media hora, para que se asiente.
~5. Sacamos la tarta y cubrimos con una segunda capa de crema, esta vez más espesa. Ya taparemos todos los bizcochos por completo.Podéis repetir el proceso dándole una tercera capa, como hemos hecho nosotros. Con estas cantidades que os proporcionamos, os da de sobra. Así, tendréis una capita gorda de crema con cada trocito de tarta. A nosotros nos encanta ;)Recordad dejarla media hora en la nevera antes de cada capa y sobre todo, antes de empezar con la decoración de fondant que le pondremos.
~Para la decoración, dejaremos enfriar la tarta en la nevera mientras preparamos el fondant y las orejitas.
~Orejitas: Utilizamos goma eva blanca (con purpurina) y rosa (sin ella), cortando unas orejitas a mano alzada (no hemos utilizado plantilla pero vosotros, podéis imprimir una si os resulta más fácil).
~Ojos: Utilizamos goma eva dorada con purpurina. Lo mismo, dibujamos y cortamos sobre la goma eva sobra la marcha, intentando que queden iguales.
~Nariz, mofletitos, patitas y bolitas del pelo: Fondant y colorante rosa.
~Bigotitos: Palillos teñidos con colorante negro.
~Pelito: Más cremita de la cobertura, decorando con manga pastelera y boquilla 2D.
¿Os contamos un secreto?.
Tambor vino a merendar con nosotros esta rica tarta de zanahoria...¡¡Y se llevó un trocito para el viaje de vuelta!!.
Os podemos asegurar que este CarrotCake obra maestra del chef, se ha ido directo a nuestro TOP 3 de tartas favoritas. Aunque denso, es muuuy esponjoso, jugoso y ese toque de nueces ummm... Si os gusta la tarta de zanahoria tanto como a nosotros, ¡os encantará ésta! =)
Sed felices dulceros.
¡¡Abrazo de ose...conejito!!
Honey Kiss.