Papa Francisco se pronunció en torno a los falsos católicos. Los que van a misa para que los vean, casi siempre envidiosos del éxito de sus semejante y muchas veces, hasta chismosos
Existe una oración falsa, en la que se busca ser admirados, cubrir las propias necesidades o encontrar consuelo. Esa oración, en la que el hermano no está presente, no es una oración cristiana: lo afirmó el Papa en la última catequesis sobre los salmos, en la que partió de la figura del “impío”, es decir, “de aquella persona que vive como si Dios no existiera y que “no teme juicios sobre lo que piensa y lo que hace”.
El Papa se refirió luego a la “oración falsa”, es decir, aquella “sólo para ser admirados por los otros”, contraponiéndola con aquella sincera, que “hace contemplar la realidad con los ojos mismos de Dios”:
“Quienes van a misa sólo para hacer ver que van a misa, que son católicos o para mostrar el último modelo que han comprado... para hacer una buena figura social. Van a una oración falsa.”, continuó diciendo.