Cuando tu perro es antisocial y la culpa es tuya

¿Tu perro no aguanta tener a otro can a su lado? ¿Se lanza a morder a cualquier perro que se le acerca? Me encuentro todos los días con estos casos y los dueños te dicen siempre: “es que es muy mala“, “no le gusta que se le acerquen“, “está con el celo…“. Pero, ¿te has planteado alguna vez que la culpa de ese comportamiento en tu perro es sólo tuya? Pues lo es.

Muchas personas transmiten sus miedos a sus mascotas. Cuando son pequeños imprimen ese pavor a lo desconocido en el cerebro de su perro. Cuando son adultos seguirán siendo miedosos ante ciertas situaciones y la reacción al miedo de casi todos los perros es la misma: atacar a la amenaza. La razón de su comportamiento es el instinto, la razón del nuestro es la ignorancia.

Que tu cachorro juegue con otros perros, de cualquier tamaño, le beneficiará en muchos aspectos:

• Aprenderá dónde está su sitio dentro de la manada.
• Desgastará mucha energía y fortalecerá sus músculos.
• Aprenderá a comunicarse con otros perros (señales de calma) y contigo, aunque tú ni lo percibas.
• Dentro de una camada estará más protegido que estando fuera, en solitario.

Sácale atado y/o suelto con otros perros de igual tamaño que él o de mayor tamaño. Él le hará entender a los demás cuando el juego ya no le guste o se sienta amenazado. Y si alguna vez se tira a otro perro, no le des importancia, está diciéndole que ya se ha acabado el juego y que le deje un poco en paz. Cuanta más diversidad de amigos tenga, en mejor perro se convertirá, tanto fuera como dentro de casa.

Perro pequeño y perro grande juntos

Evitando que tu perro sea un antisocial, evitarás posibles problemas en casa. Estos perros suelen ser bastante ariscos y también suelen ver como amenaza a personas desconocidas. Así, si alguien nuevo viene a tu casa y le va a acariciar puede que tu perro se tire hacia esa persona para morderle. Tu perro vive atemorizado constantemente, porque ve en todo ser vivo mayor que él una posible amenaza.

Intentemos que nuestros perros puedan pasear tranquilamente por la calle sin sentir miedo constante. No tengas miedo, ningún perro quiere hacerle daño al tuyo. Simplemente se olisquean, se pone cada uno en su lugar y después de eso, o juegan o se ignoran.

No olvides una cosa, tu perro es como es porque tú has querido que sea así.