Platicando con un amigo sobre temas tecnológicos surgió la pregunta acerca de cuánto tiempo más durará Facebook en la cumbre de las redes sociales. Mi primer respuesta fue cinco años. Para explicar dicha respuesta mencioné que Facebook lleva justo una década desde que nació de la mano de su creador Mark Zuckerberg. Y una década pesa cuando se habla de tecnología.
Sin embargo, discutiendo más a fondo sobre las fortalezas y debilidades de Facebook llegué a la conclusión de que la empresa aún dispone de más de las primeras que de las segundas. Esto y la capacidad de adaptación al mercado que ha mostrado la empresa me hace pensar que podría durar otra década en el poder. Pero la verdadera respuesta depende de una sola cuestión: la competencia.
El reino de las redes sociales algún día perteneció a MySpace y Hi5, entre otras. No es que haya querido abandonar dichos servicios pero cuando Facebook llegó lo hizo con tal fuerza que no lo pensé dos veces. De esta misma forma Facebook va a durar hasta que aparezca en el mercado un nuevo servicio de red social que capte la atención de los usuarios. Mientras este no llegue Facebook es dueño y señor.
No son pocos los intentos de desbancar a Facebook de su trono y quizá el más sonado fracaso haya sido Google+. La red social del gran gigante tecnológico llamado Google prometía mucho, más que nada por el poder económico de dicha empresa, pero la cosa no ha estado ni cerca de lo que prometía. Por eso Google+ vive a la sombra de Facebook y difícilmente lo superará si no hay cambios radicales.
La cuestión es que cuando se acumulan tantos usuarios, como en el caso de Facebook, resulta imposible darle gusto a todos. El más mínimo cambio gustará a muchos pero también molestará a otros tantos. Esa molestia se irá acrecentando hasta el punto de que cuando exista una mejor opción no habrá duda en cambiar lealtades, si es que algo así existe.
Volviendo con mi amigo, este me comentó algo muy interesante. Lo que dijo fue que estaba sumamente cansado de Facebook pero que usaba la red social porque no había nada más que cubriera sus necesidades de comunicación con todos sus contactos. En mi caso sucede lo mismo; Facebook llega a cansarme pero ahí encuentro a prácticamente todos mis contactos y por eso vale la pena permanecer ahí.
No sé si sea solo cosa mía creer que Facebook está dejando de crecer. Al parecer las estadísticas también indican que la red social está ganando usuarios con menor velocidad que antes, algo que es comprensible dado su tamaño actual. Por ello la empresa necesita hacerse con mercados que aún resisten su embate, como Rusia y China, pero no la tienen nada fácil.
Imagen Marco Paköeningrat