Los cuentos infantiles de Beatrix Potter pertenecen a esa categoría de literatura infantil atemporal, cuyos libros pasan de generación en generación. La calidad y el cuidado de sus ilustraciones, así como las historias que en ellos se narran, siguen sorprendiendo y agradando a pequeños y mayores más de un siglo después de su creación.
El personaje más famoso de los cuentos de Beatrix Potter es Peter Rabbit (o Perico, el conejo travieso, en su traducción al español), cuyo primer relato fue publicado en 1902 y al que siguieron otros 22 cuentos infantiles, todos con el mismo patrón de cuento tradicional con historias dulces y sencillas.
Las aventuras de Perico, el conejo travieso, muestran situaciones de la vida cotidiana a través de la mirada de distintos animales (conejos, ardillas, gatos, ratones, cerditos, etc.). Aunque los cuentos infantiles de Beatrix Potter tienen un vocabulario muy rico que no siempre es fácil de comprender para los más pequeños, el argumento de las historias es sencillo y va acompañado de atractivas y abundantes ilustraciones, lo que los hace adecuados para su lectura a partir de los cuatro años.
Además de escritora e ilustradora de sus propios cuentos infantiles, Beatrix Potter fue una naturalista británica, cuyas bonitas acuarelas en las que queda retratada la naturaleza inglesa de su época le hicieron obtener el reconocimiento artístico internacional. Actualmente, el museo Victoria and Albert de Londres dispone de una sala dedicada a ella con los bocetos y dibujos originales que ilustran sus cuentos infantiles.
Como homenaje a la escritora, algunas editoriales comercializan sus 23 cuentos infantiles en un único volumen con el nombre de “Cuentos completos de Beatrix Potter”, que ha sido traducido a más de 30 idiomas.