Cuestión de amor, donación de órganos

Como seres humanos en toda la extensión de la palabra, dar parte de nosotros en vida o después de morir es el gesto más grande de amor que puede tener una persona por lo que en este artículo exhortamos a la población a unirse a la donación de órganos.

Para ser donantes no importa el género u origen, la edad de los potenciales donantes oscila entre los 2 y 80 años, los menores de edad candidatos a donar necesitan autorización de los padres o tutores. Se pueden donar órganos y/o tejidos y se puede ser donador en vida o posterior al fallecimiento. Las donaciones en vida pueden ser desde donar sangre a las instituciones de salud, el cual es un proceso ambulatorio. Hasta someterse a una cirugía mayor para la extracción de algún órgano.

Si se desea ser donador posterior al fallecimiento, se debe registrar como donador firmando una tarjeta de donantes. Es importante que sí se desa ser donador después de la muerte, le sea comunicado a su familia ya que es imperioso que ellos esten enterados y esten de acuerdo, ya que aun teniendo la tarjeta de donador voluntario la familia (esposo(a), hijos, padres o hermanos) es la que debe autorizar la donación, por lo que es muy importante que ellos estén enterados y respeten la decisión de ser donador.

Una vez que decidas ser donante posterior al fallecimiento, se deja el siguiente paso a la medicina y la ciencia la cual se encargará de indicar si existe compatibilidad entre el donante y el hospedero. Como ya se mencionó las donaciones pueden ser de órganos o tejidos. Cuando una persona fallece se realizan los estudios necesarios para asegurarse de que los órganos y tejidos son viables para beneficiar a los receptores, ya que no todas las personas que fallecen pueden ser donantes y hay que asegurarse de que no transmitan infecciones o cáncer.

Según los parámetros del IMSS en México, en caso de haber perdido la vida por muerte encefálica ( pérdida irreversible de las funciones del cerebro; sin embargo, los órganos y tejidos pueden mantenerse funcionando mediante un ventilador artificial y medicamentos que ayuden a la presión del corazón), se puede ser donador de órganos como corazón, pulmones, hígado, páncreas, intestino y riñones. Los tejidos que se pueden donar son córneas, tejido musculo esquelético, válvulas cardíacas, hueso y piel. También podrán donar tejidos los pacientes que murieron por un paro cardiaco irreversible

Para que una persona sea compatible de recibir una donación de órganos, se debe tener en cuenta su compatibilidad inmune. El sistema inmune al cual podríamos llamar los policías del organismo, se encarga de reconocer los microorganismos, toxinas u otros agentes que puedan dañar a nuestro organismo. Por lo que el órgano que se trasplanta debe ser reconocido por el hospedero como parte de sí mismo. Aunque cada órgano tiene sus propios factores para ser donados existen factores generales de donación, por ejemplo, la compatibilidad del grupo sanguíneo, la condición de salud del paciente, tiempo de espera del paciente, ausencia de infecciones, entre otras. Además se debe considerar el tiempo que puede pasar un órgano fuera del organismo y tener en cuenta la distancia entre el hospital del donante y el hospital del posible beneficiario.

Entre 2018 y 2020 se vieron los primeros resultados de trasplantes de rostro. También se ha incursionado en trasplantes de pene y escroto, pero aún se está lejos de realizar un transplante de cabeza o cerebro.

En palabras de un amigo que necesita un riñón:

Necesitaba y aún necesito un riñón. Mi papá, entró al infierno por mí, ya que él fue mi donador. Aunque sea por un tiempo me mantengo con este riñón. Fue difícil para nosotros, pero, valió la pena. Falta más tecnología de trasplantes para que duren más.

En México el sitio para registrarte como donador de órganos es CENATRA (Centro Nacional de Trasplantes).

Para poner el ejemplo, una servidora se registró mientras escribía este artículo. Tú también puedes salvar vidas después de la muerte registrate como donador.