La cultura Chachapoyas se desarrolló entre los 800 d.C. y 1570 d.C. en el noreste del Perú. Sus territorios se extendieron unos trescientos kilómetros a lo largo de las actuales regiones de Amazonas y San Martín. La etapa en la que florecieron y establecieron su identidad es conocida como Chachapoya Clásica, desde el 800 d.C. hasta la invasión incaica cerca del año 1470 d.C.
INFLUENCIA CULTURAL DE LA CULTURA CHACHAPOYAS
Los chachapoyas se desarrollaron en un aislamiento. Sin embargo, hay evidencias de que esporádicamente interactuaron con otros grupos que habilitaban al norte y el oeste del río Marañón. Los restos hallados tanto de su producción artística como arquitectónica parecen sugerir que descendían de inmigrantes andinos que adaptaron su cultura ancestral al nuevo medio. El desarrollo relativamente aislado de los chachapoyas llegó a su fin cuando en el siglo XV fueron dominados por los incas.
MEDIO AMBIENTE
La cultura Chachapoyas floreció en zonas ubicadas en la ladera este de los Andes, entre los 2 mil y 3 mil metros, sobre el nivel del mar. Región bastante húmeda por las continuas lluvias, con densa vegetación, pantanos y permanentemente cubierta por neblina. Se ha sugerido, que el significado chachapoyas podría ser bosques nuboso, característica del medio ambiente en el que se desarrollo esta cultura.
ORGANIZACIÓN SOCIAL
Diversos grupos étnicos que comparten una similar tradición cultural en el territorio actualmente comprendido entre las regiones de Amazonas y San Martin se unieron en una especie de Estado confederado a comienzos del año 800 d.C. Las grandes provincias eran totalmente independientes entre si y estaban controladas cada una por un poderoso curaca. Estos grupos compartieron un mismo idioma, así como costumbres y técnicas de cultivo similares. Se congregaron para las ceremonias religiosas o para defenderse del ataque de un pueblo enemigo.
AGRICULTURA
La agricultura se desarrollo aprovechando el acceso a una variedad de ecosistemas. Las laderas de los cerros se transformaron en anchas terrazas de cultivo y las zonas bajas se cultivaron en campos con elaborados sistemas de drenaje. Cultivaron tubérculos como la papa, la mashua, la oca y el olluco, y en granos como la quinua y la kiwicha en zonas que varían desde los 3200 hasta los 3800 metros sobre el nivel del mar.
Los chachapoyas dependieron de la agricultura del pastoreo, la caza y la recolección para su subsistencia. Además, basaron su economía en la producción doméstica de cerámica y de textiles. La producción y el intercambio de alimentos ayudaban a consolidar las redes sociales y las alianzas entre las poblaciones.
ENTIERROS Y QUIPUS
En 1996 se hallaron varias chullpas o tumbas en acantilados de piedra caliza, a unos diez metros encima de la Laguna de los Cóndores (región Amazonas). Cada tumba mide aproximadamente tres metros de alto y está dividida en dos niveles por una tarima de pequeños troncos. Inicialmente los chachapoyas no embalsamaban a sus muertos. Fueron los incas quienes introdujeron esas técnicas más adelante. Escogieron sitios de entierro con características que permitieran la preservación de los cuerpos. En las laderas del bosque eligieron cornisas secas de baja temperatura y con pocas horas de sol al día, lo que contribuye a la preservación de los restos orgánicos.
En estas tumbas también se descubrió una cantidad importante de quipus, que se encuentran actualmente en el museo Leimebamba. El estudio de los quipus podría aclarar y descifrar muchos aspectos aún desconocidos de esta enigmática cultura.
ARQUITECTURA
La cultura Chachapoyas se caracteriza por la riqueza de sus edificios, muchos de ellos decorados con un sistema de frisos hechos con piedras dispuestas a desnivel, formando diseños geométricos a modos de grecas. En general, las construcciones habitacionales y monumentales son circulares y de piedra, sus paredes tienen relieves de piedra decorada, en varios casos, con figuras simbólicas. Poseen rampas inclinadas o escaleras dirigidas hacia la entrada y se tendió a erigirlas sobre plataformas ubicadas en pendientes. Los complejos arquitectónicos más destacados son Kuélap y Gran Pajatén.
KUÉLAP
Es una especia de ciudad fortificada con muros de 600 metros de largo y hasta 19 metros de alto. Esta ubicada en la actual región Amazonas, en un lugar de difícil acceso, a unos 3 mil metros de altitud y al borde de un abismo. Protegidas por los muros, se han encontrado alrededor de cuatrocientas construcciones, en su gran mayoría circulares. El ingreso a la plataforma principal se debe realizar por callejones estrechos, característica que sugiere que Kuélap fue edificada con fines defensivos. Esta ciudadela contó con un sofisticado sistema de caminos y de drenaje del agua de lluvias mediante canales que recorrían todo el complejo. Entre los frisos de las paredes destacan los motivos romboidales.
GRAN PAJATÉN
Impresionante fortaleza ubicada en la selva de la región San Martín, en la cuenca del río Abiseo. La edificación presenta frisos con motivos simbólicos como algunos personajes antropomorfos, con brazo y piernas abiertas; aves con alas extendidas y cabezas clavas. Los restos arquitectónicos de esta cultura conforman una veintena de estructuras entre las que destacan tres edificios con un diámetro de aproximadamente 15 metros.
RELIGIÓN Y ARQUITECTURA FUNERARIA
Se sabe poco de la cultura Chachapoyas respecto a su religión, sobretodo antes del dominio inca. Sin embargo, la complejidad de la arquitectura funeraria indica la importancia que esta cultura dio a los antepasados y a la muerte. Se han detectado dos patrones funerarios en esta cultura: el sarcófago y el mausoleo.
EL SARCÓFAGO
Sarcófagos de Karajia
También llamado purunmachu, es una evolución del fardo funerario. Tenían forma humana y eran elaborados en arcilla con ayuda de palos y piedras; conservaban en su interior un espacio para colocar a los difuntos en cuclillas y envueltos en textiles, por lo general, llevaban ofrendas de cerámica, textiles y calabazas. En la parte superior del sarcófago se colocaban falsas cabezas de cara aplanada, mentón prominente y nariz de grandes dimensiones. Ejemplos de este patrón se encuentran en Karajia, Chipuric, Petuen, Guan y Ucaso.
EL MAUSOLEO
También conocido como chullpa o pucullo, tenía forma cuadrangular y hasta tres niveles de nichos, donde reposaban los muertos acompañados por ofrendas como collares, plumas, cerámicas e instrumentos musicales. Tanto dentro como fuera del mausoleo se realizaban pinturas de color rojo con diseños de cruces, rectángulos y formas parecidas a la letra T. Ejemplos de mausoleos se encuentan en Revash, Usator y la Laguna de los Cóndores.
COMPLEJO FUNERARIO DE SHOLÓN
Un expedición a la selva de Chachapoyas, dirigida por el investigador Alvaro Rocha, descubrió en el año 2003, el Complejo Funerario de Sholón, en el camino al Gran Vilaya. Allí se hallaron mausoleos semicirculares de case diez metros de altura, adornados con frisos que albergan momias y textilería de la cultura Chachapoyas.
ARTE E IDENTIDAD
Desarrollaron un lenguaje simbólico con motivos geométricos característicos en forma a triángulos, rombos, serpenteados y ornamentos cuadrados, que aparecen sobre las viviendas circulares en frisos de piedra. Los símbolos fueron de valor significativo, tanto a nivel étnico como social.
TEXTILES
En la cultura Chachapoyas se hallaron piezas en las tumbas de la Laguna de los Cóndores, los cuales dan testimonio de la habilidad de los tejedores chachapoyas, no solamente en el arte y tecnología de la manufactura, sino también en la original iconografía de sus diseños. De acuerdo con el cronista español Pedro Cieza de León, los chachapoyas hacían rica y preciada ropa para los Ingas, y hoy día la hacen muy prima, y tapicería tan fina y vistosa, que es de tener en mucho por si primor.
CERÁMICA
La cerámica de la cultura Chachapoyas es tosca y buena parte de la encontrada es utilitaria, trabajada sencillamente. Las técnicas de decorado fueron aplicación, estampado, punteado y técnica incisa. Las vasijas llevaban aplicaciones de bandas en los bordes; algunas presentan incisiones o pequeñas protuberancias en el cuerpo.