Hoy hemos conocido un caso curioso de crianza no sexista, unos padres del Reino Unido están criando a su hijo como niño y como niña, el pequeño puede vestirse como un niño y estar jugando con una moto de juguete o con muñecos asociados al estereotipo masculino, o de repente ponerse un vestido de niña y jugar con muñecas, a las cocinitas, etc. El pequeño va a cumplir dos años de edad y está siendo criado siguiendo la técnica del “género neutro”, como habréis deducido, se basa en la no distinción de géneros, los niños se visten y juegan con elementos de los dos géneros.
Para los padres esta técnica del género neutro es beneficiosa, ya que se evitan los estereotipos, un niño criado con género neutro no será ni agresivo, ni dominante, no maltratará ni discriminará a las mujeres cuando sea adulto. Los padres consideran que realizar distinción de sexos es perjudicial y por ello decidieron criar a su pequeño de este modo, no se le prohíbe y no se le condiciona por su género, si le apetece pintarse las uñas en vez de jugar al fútbol, los padres lo ven con buenos ojos, si quiere ponerse un tutú y además unas alas de hada, tal y como aparece en la fotografía, ¿por qué no?.
El pequeño puede elegir que ropa ponerse y con qué juguetes jugar, se le educa en un marco de tolerancia y afecto intentando evitar lo que la mayoría de familias hacen (eso dicen los padres), inculcar la violencia a sus hijos, enseñarles a que sean agresivos desde pequeñitos, que dominen la situación y al género femenino. Estas son sus conclusiones, personalmente creemos que los extremos son muy peligrosos y la crianza en género neutro tal y como plantean estos padres, es extremista.
Se puede educar en igualdad, se puede jugar con todo tipo de juguetes sin hacer distinciones, pero es exagerado dejar que un niño si quiere se pinte las uñas o los labios, que vaya vestido con ropa de niña al colegio… podemos imaginar mil y una cuestiones que no creemos que encajen en el marco de la igualdad coherente. Evidentemente cada familia tiene su opinión e intenta criar a su hijos de la manera que cree más correcta.
Los padres explican que esperan que no se burlen de su hijo cuando sea mayor, aunque explican que con la crianza neutra tratan de inculcar en el niño el sentido de la confianza y de quién es, que no le importe lo que piensen los demás, se puede decir que lo preparan para ir a contracorriente de una sociedad que consideran machista, desigual y violenta. El concepto de paternidad no sexista no es nuevo, se hizo popular en la década de los años 70 entre las feministas estadounidenses, es decir, una posición extremista como lo es machismo.
Evidentemente hay muchos casos similares al del pequeño Max Price, según leemos en Daily Mail, se han sucedido diferentes casos en los que se ha intentado dejar a un lado el género de un hijo. En el año 2011 una pareja canadiense fue noticia al negarse a revelar el sexo de su bebé, manifestaban que se trataba de un homenaje a la libertad y a la elección. Otro caso en el Reino Unido reveló que se estaba criando a unos niños con género neutro para permitir que aflorara su personalidad real, sin los condicionantes de los estereotipos y la sociedad.
Ahora el pequeño no tiene problemas, ya que está en casa con sus padres, pero ¿qué ocurrirá cuando vaya al colegio? La madre declara que si desea ir vestido de niña se lo permitirá, añade que a ella no le importa si en un futuro es homosexual, transexual, bisexual, heterosexual o asexual, declara que quiere a su hijo por lo que es y no quiere que existan condicionantes para quererlo más o menos. Como decíamos, los extremos son erróneos y peligrosos. ¿Qué opináis?, ¿consideráis que este es un modelo de crianza no sexista a seguir?
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Curioso caso de crianza no sexista