A veces hay algún elemento en casa que ya tenemos muy visto pero que nos resistimos a tirar porque aún funciona o nos es útil, ¿verdad? Pero a la vez, siempre apetece y sienta bien un pequeño cambio de vez en cuando, ¿no? Bien, pues desde aquí os proponemos que mantengáis el objeto en cuestión pero que os animéis a darle un pequeño cambio de look. ¿Qué os parece?
Hoy en Tutéate, por si os sirve de inspiración, compartimos el antes, el durante y el después de un sencillo reloj de cocina, una transformación rápida y al alcance de todos.
Material necesario:
- Reloj viejo
- Papel estampado
- Pegamento o cinta adhesiva de doble cara
- Lápiz, rotulador y tijeras
- Plantilla para números (opcional)
Pasos a seguir:
1- Quitar las pilas, la tapa y las agujas del reloj. Recortar un trozo del papel estampado con la misma forma que el fondo del reloj.
2- Marcar los números correspondientes a las horas que queramos sobre el futuro papel de fondo.
3- Pegar el papel estampado sobre el antiguo fondo del reloj con la ayuda de pegamento o cinta adhesiva de doble cara.
4- Colocar de nuevo las agujas, la tapa, las pilas y… ¡Listo! Ya tenemos un “nuevo” reloj.