La celebración de San Miguel Arcángel cierra las festividades del estío e inaugura el periodo de siembra y la llegada del otoño: en la ciudad de Segovia, la iglesia de San Miguel se localiza en uno de los laterales de la Plaza Mayor, y cuenta con una de las imágenes de mayores dimensiones ubicada en el centro de su retablo; a su vez, y en la provincia de Segovia, son diversas las localidades que festejan a este santo reconocido por las alas de su espalda, su armadura y un dragón o demonio bajo sus pies: si Cuéllar celebra su patrón con vaquillas, Sebúlcor lo hace con encierros, pelota a mano y caldereta, y Castroserna de Abajo con danzas de palos en su honor.
La particularidad de Castroserna de Abajo, enclavada en la Tierra de Sepúlveda, es que cierra el mes de septiembre con dos celebraciones, la dedicada a San Miguel Arcángel, fijada el último sábado del mes, y la dedicada a la Virgen de los Remedios, festejada el último domingo: en ambas, las respectivas procesiones de la tarde cuentan con danzas de palos. Este año, y gracias a Demetrio García, dulzainero de La Matilla que conoce “al dedillo” el repertorio de las danzas procesionales de Castroserna desde hace décadas y que ha recuperado las danzas de su localidad natal en 2014, los danzantes de Castroserna de Abajo y los danzantes de La Matilla comparten protagonismo y danzas en honor de las dos imágenes citadas.
Recuperación de las Danzas de palos en Castroserna de Abajo y en La Matilla
La recuperación de sus paloteos en el 2007 gracias al empeño de la Alcaldesa -Luisa González-, ha devuelto a Castroserna de Abajo la presencia en los ritos religiosos de los danzantes masculinos ataviados con faldillas y espaldares decorados con flores, un conjunto único en la provincia de Segovia que he estudiado en la Beca de Investigación concecida por la Diputación de Segovia, a través del Instituto de Cultura Tradicional Segoviana “Manuel González Herrero”, y que verá la luz en los próximos meses. Desde esa fecha, el grupo actual es mixto, y en su repertorio figuran títulos como La Reverencia -diseminada por numerosas localidades segovianas- o El Credo y La Cachucha -compartidos a su vez con localidades situadas en la tierra de Pedraza y Sepúlveda-; mantienen también otras danzas rituales como la Danza del Arco, que se ejecuta al final de la procesión de la Virgen de los Remedios -el domingo-, para introducir la imagen en la ermita que lleva su nombre, a escasos kilómetros del pueblo.
Por su parte, la recuperación de los paloteos en La Matilla en 2014, tras dos décadas de pérdida como me asegura el dulzainero local Demetrio García, tiene la firma de este gran conocedor del repertorio de las Danzas de Palos de la Tierra de Pedraza y la Tierra de Sepúlveda, desde que iniciara su recopilación a finales de la década de los 60. La nueva generación de danzantes de La Matilla cuenta con unos veinte integrantes entre hombres y mujeres, y danzaron por primera vez en la fiesta de la Virgen del 15 de Agosto. El atavío masculino presenta un conjunto de camisa, calzón de paño y chaleco donde destacan dos adornos: el picado de paño de la espalda del chaleco sobre piqué blanco, y las borlas de lana decorativas del calzón, que conservan otros danzantes en sus ligas, como los de Gallegos de la Sierra -Tierra de Pedraza-. El repertorio inicial, consta de seis títulos, entre los que figuran El Credo, Las Castañuelas -compartido con Valleruela de Pedraza- o El Cuatreo -denominado El Peral en San Pedro de Gaíllos-.
En la tarde de ayer sábado, los dos grupos compartieron danzas en la procesión de San Miguel y hoy domingo lo harán en la dedicada la Virgen de los Remedios y que tendrá lugar por los alrededores de la ermita. En las fotografías, un momento de la ejecución de La Cachucha por parte de los grupos, la ejecución de La Reverencia con los danzantes de Castroserna de Abajo y algunos de los danzantes de La Matilla con el dulzainero Demetrio García.
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