David Brent, trece años después, camino a convertir el éxito televisivo en cinematográfico.
La prensa anglosajona anunció el martes la nueva ocurrencia de Ricky Gervais: resucitar a su alter ego David Brent para que vuelva a entretener, ya no como el gerente de la oficina que fue éxito televisivo a principios del milenio, sino como viajante especializado en productos de limpieza. El regreso será cinematográfico: lo producirá la BBC, se filmará en 2015 y se llamará Life on the road.
El título parece articular la naturaleza nómade del actual trabajo con el viejo sueño de convertirse en rock star a caballo de giras nacionales. En esta pretensión de estrellato musical se inspiró Gervais para ensayar el aggiornamiento de Brent antes de tirarse a la pileta con el proyecto del largometraje.
En su servicio de noticias online, la BBC enumera tres amagues recientes de reanimación del (ahora ex) gerente de la papelera Wernham Hogg: la aparición en un evento solidario de la fundación Comic Relief, la publicación de una serie de cortos donde David enseña a tocar guitarra, los mini-recitales en vivo de la presuntamente prometedora banda Foregone Conclusion.
El mismo artículo adelanta que la película mostrará a un Brent dispuesto a pagar de su propio bolsillo a los músicos que lo acompañan. Al parecer, será muy poco el dinero derivado de la venta de entradas a sus recitales.
En sus respectivas coberturas, The Independent y The Guardian recordaron que unos siete millones de espectadores vieron el final de The office en 2003. También que la serie fue emitida en un centenar de países, y que inspiró varias versiones locales. La más conocida es la norteamericana, protagonizada por Steve Carell.
En esta brevísima charla que mantuvo con The Wrap, Gervais dijo que “no tendría sentido volver a The office“. Luego ironizó: “Imaginemos que regresamos a la oficina donde trabajamos veinte años atrás y nos encontramos con nuestros antiguos compañeros. ¿No estarían todos muy viejos?”.
El guionista, productor, actor británico prefiere fantasear con un falso documental (los ingleses lo llaman ‘mockumentary‘ por la intención burlona) que gira en torno al Brent actual, “con otro trabajo pero con la misma ambición de ser famoso hasta tener canal propio en YouTube” (dicho sea de paso, como Ricky). La clave de la película radicaría entonces en el paso del tiempo o -tal como bromeó el entrevistado- en el hecho de que “el protagonista y los demás integrantes de la banda están grandes y con problemas: uno tiene lumbago, el otro está preso por agresión sexual…”.
Cuando en marzo de 2013 comentamos uno de los últimos trabajos de Ricky (Life’s too short), advertimos sobre el cansancio que las ocurrencias del entertainer británico parecen provocar en una porción del público que lo conoció y admiró en tiempos de The office. Vale preguntar si resucitar a David Brent será la mejor estrategia contra el hartazgo.
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