Me iba a manifestar sobre los evidentes cambios que se han producido estos días con lo del apagón analógico y el encendido digital. Ese cosquilleo que debe de haber sentido sólo el ministro del ramo al haber anunciado la buena nueva. Esa pluralidad que sólo ven los que se creen plurales, esas infinitas posibilidades de pago, esa alta definición de la misma miseria.