Esta reseña es del estilo del de Babas y Baberos, así que si no tienes niños pequeños, tal vez este post no te interese tanto y puedes dejar de leer aquí.
Recuerden que la sección de Reseñas es para hablar de cualquier producto, artículo para bebé, tienda, espectáculo o restaurante que valga la pena compartir con otras mamás. Esta vez, la reseña le toca a un vasito entrenador.
Si no tienes hijos, seguramente ya ni siquiera estás leyendo esto, pero si sí los tienes, seguramente entenderás la razón por la cual me emociona algo tan sencillo como un vasito entrenador.
Con tres hijos que ya dejaron el biberón, créeme que en estos 5 años ya he probado todos los vasitos entrenadores habidos y por haber.
Los primeros que descarto son aquellos que se escurren y chorrean por toda la pañalera. ¿Qué chiste tiene traer una muda de ropa si ésta va a estar más mojada y sucia que la que ya trae puesta tu hijo, no?
Otra cosa que me choca es tener que lavar mil partes de un vasito. La verdad es que esas válvulas de plástico anti-derrames que se quitan y ponen nunca quedan bien limpias. Además, se van desgastando (por lo que realmente dejan de ser anti-derrames) y siempre se acaban perdiendo. Los vasitos de popote me parecen aún peor.
Pero desde que Pía dejó el biberón, encontré estos que me han resultado maravillosos. Son de la marca The Learning Curve: The First Years. Primero, la válvula anti-derrames está integrada a la tapa, por lo que no se pierde ni se afloja. Y como la boquilla no es demasiado profunda, resulta fácil de lavar. Es térmico. Le caben 9 onzas de líquido. Y en serio, no se derrama.
Vienen con mil opciones de diseño, así que seguramente encontrarás uno que le guste a tu hijo o hija.
Y esta es la mejor parte: antes tenían que ser un encargo para cualquier persona que viajara a Estados Unidos, pero ¿qué creen? ¡Ya los encontré aquí en México!
Sé que todo esto es cuestión de gustos (de la mamá y sobretodo, del bebé), pero si tu hijo ya está listo para dejar el biberón, creo estos vasitos son un buen lugar para empezar a probar.
A ti, ¿cuáles vasitos entrenadores te acomodan?