Llega el verano y hay que planificar las vacaciones familiares. Ir con niños suele ser un condicionante a la hora de elegir destino y medio de transporte. Desde aquí, proponemos ir de camping como una de las mejores opciones para que disfruten los pequeños y también los más mayores de la casa.
Lo primero que tenemos que saber es al lugar donde queremos ir: playa, montaña, algún pueblecito… Y luego tenemos que tener claro cuáles serán nuestras necesidades en esos días: si queremos piscina, si llevamos perro…
La primera propuesta es la acampada con tienda. Bien sea libre, o en un camping debemos elegir la tienda que mejor se adapte a las necesidades de la familia y a la cantidad de personas, ya que la comodidad es una factor muy importante a tener en cuenta. Además también hay que hacer hincapié en el descanso. Elegir unos buenos colchones será importante y también será conveniente contar con un hinchador. En cuanto a los sacos de dormir nos los llevaremos dependiendo de la época del año, ya que si hace calor igual preferimos dormir directamente encima del colchón tapados con una fina sábana.
La siguiente opción es pasar las vacaciones en bungalows o caravanas. Cada vez son más las familias que deciden instalarse en una rulot o en una pequeña cabaña debido a las comodidades que ofrecen y a su excelente relación calidad precio.
El alojarse en un camping, ya duermas en tienda, caravana o bungalow supone un plus para nuestros hijos. Pueden moverse a sus anchas por el recinto, juegan con otros niños, nadan en la piscina, pasean en bici o se van de excursión. Lo que significa que además de disfrutar, estarán haciendo ejercicio físico. Lo que nos lleva a recordar que será sumamente importante la hidratación cuando estén realizando estas actividades.
Además en los campings suelen contar con un servicio de animación para los niños y les preparan juegos, actividades o excursiones. Esto supone que podremos disfrutar de un tiempo para nosotros mismos. Eso sí, habrá que saber distribuir el tiempo y lograr un equilibrio entre el tiempo que les dedicamos a ellos y el que pasamos solos. Aunque es muy frecuente que a determinadas edades prefieran pasar la mayoría del tiempo jugando con sus amigos.
En general los campings suelen ser gratuitos para los menores de 3 años y se les hace un descuento a los menores de 10, aunque todo esto dependerá de la temporada. Lo mejor es consultarlo directamente con el lugar que vayas a elegir.
Foto: OCVA