de la ciudad al campo, plantando patatas, nofler

Plantando patatas

Ayer he plantado patatas , una pija-jipi de ciudad, como yo, he plantado con ayuda de mi vecina, patatas gallegas de las ricas…me siento orgullosa, no orgullosa  es poco, me siento entusiasmada como el de viky el vikingo.

Desde que he cambiado mi forma de vivir, recuerdo mi vida anterior, compras, pelu, cine, tiendas, etc…por mi vida actual, campo, animales, casa, familia, estoy descubriendo que no necesitamos nada de lo que esta sociedad ofrece.

Mi vida actual está orientada al NO CONSUMO DESCONTROLADO, aunque es misión imposible, al menos lo intento cada día un poco más integrada en la vida rural rodeada de la maravillosa naturaleza.

Pude comprobar en mis propias carnes, que los aldeanos, aquellos hombres toscos que viven de la tierra yque muchos desprecian, son las personas más sabias que he conocido jamás, cuyos libros son la propia experiencia de la vida, los relatos de sus antepasados, la herencia familiar de abuelo a nieto y la sabiduría que ofrece la propia naturaleza.

Plantar patatas no es tan fácil como parece. Además de saber en que luna plantar, conocer que tiempo va a hacer, necesitas otros conocimientos más concretos.

El tipo de estiércol que pongas es imprescindible para saber la calidad y cantidad de cosecha.

Pero además lo más importante que jamás hubiese pensado es esto:

Cada patata que se planta se saca de la propia patata cortada en el momento con un cuchillo, la patata se divide en : culo, ojos y cejas, no es broma , que va , Esto es muy serio!!!! Ja, ja que risa, que bien me lo he pasado con esta nueva experiencia.

¿Curioso? Más que curioso,sino sabes diferenciar entre el ojo y el culo, que para mí son iguales, si te equivocas y plantas el culo, la patata no crece, no tendrás cosecha.

Los ojos se le descubren, cuando ves la ceja que lleva cada ojo, si no sabes esto, no sabes plantarlas.

Otra cosa curiosa que contar, en la vida no hay nada mejor para cada ser humano, que ganarse el pan con el sudor de la frente, cuando no haya trabajo o cuando lo haya pero este no aporta más que dinero, la mejor forma de sentirse bien en esta complicada vida, no es comprar cosas innecesarias, si no al contrario sembrar para obtener fruto con el paso del tiempo.

Moraleja, vivir en el campo, ser aldeano, plantar y envejecer viviendo, es una forma magnífica de no tener depresión y tener siempre alimento sano y fresco.