Durante este mes de octubre el Colegio de Biólogos de Euskadi ha organizado un curso de acuarela naturalista impartido por el ilustrador Raúl Domínguez. Pensé que sería interesante acercarme a plasmar la naturaleza sobre el papel. Se ha tratado el tema durante tres días, dos de ellos en estudio improvisado en el propio Colegio de Biólogos en Bilbao y posteriormente se ha completado con una salida de un día completo al parque natural de Urkiola.
Los dos primeros días se pintó tanto del natural -usando modelos naturales como frutas o flores u otros- como de imágenes facilitadas por Raúl. Como había distintos niveles de conocimiento de la acuarela, muchos de los ejercicios se proponían para cada persona como un reto personal a superar, como pintar con la imagen invertida para no tener conciencia de la realidad de lo que se pintaba, o con la mano izquierda si uno era diestro. Es decir hacer algo diferente a lo que uno está acostumbrado.
Para acabar el curso, la salida era en el parque natural de Urkiola, aquí dio tiempo suficiente para pintar en distintos lugares, desde espacios más abiertos, a lugares más recogidos. Descubrir el bosque de hayas o el paisaje lejano, incluso intentar atrapar el movimiento de los caballos pastando en el prado. Lo más difícil, intentar que lo observado y llevado al papel explique las sensaciones, trasladar la sensación de ese pétalo tan sedoso al papel, o el musgo que recubre el tronco del haya, o la masa de hojas otoñales que se mueven con el viento.