El cómputo ha traído muchos beneficios pero también muchas batallas legales. Hay demandas porque la empresa X usó parte del código de la empresa Y sin los respectivos permisos. De hecho, Linux es un ejemplo de que -para evitar estos conflictos- hubo que escribir un "Unix" desde cero, sin usar una sola línea de código del Unix original, por aquello de evitar las demandas. Y sí, puede entenderse que las compañías de software busquen proteger sus derechos autorales, pero ya se ha llegado el momento en el que algunas patentes son realmente absurdas.
Por ejemplo, Microsoft ahora demanda a Corel Draw porque usan las barras deslizantes, un componente común en muchísimos programas. El propio Microsoft las usa en Word y Excel para hacer más grande la letra de lo que presenta en pantalla. Pero siendo este un componente tan común ¿está sujeto a una discusión legal sobre su uso? De acuerdo a la EFF ( Electronic Frontier Foundation), esto es un ejemplo de la patente estúpida del mes. Vale la pena leer lo que dice la EFF porque ya el nivel de estupidez parece haber sobrepasado todo lo predecible.
Específicamente la queja es que Corel infringió la patente D'140 de la interfaz de usuario en una porción de la pantalla de despliegue. Nótese que de entrada no se dice qué hace una barra deslizante. Podría pensarse trivialmente y decir que una barra deslizante es una manera de mostrar un valor que puede cambiar entre dos valores, inicial y final. Es un componente de lo más común en las interfaces gráficas modernas. Pero he aquí la prueba gráfica que presenta Microsoft al mostrar la barra deslizante culpable en Corel Write:
Si la empresa de las ventanas gana el caso, entonces Corel tendría que ceder todas las ganancias hechas en su producto Corel Home Office. Parece ser además que la pena podría ser más ridícula aún. Es claro que cuando Microsoft diseñó la barra deslizante, este componente era nuevo y nada obvio en el 2006 (cuando Microsoft lleno las formas de la patente), pero el efecto final en las penas por violar esta patente parecen desproporcionados y el asunto podría usarse simplemente para intimidar a la competencia legítima con simplemente la amenaza de una demanda por casi cualquier elemento que se vea en la pantalla.
No es la primera vez que se venden este tipo de demandas. Si no mal recuerdo, Apple se enfrascó con Microsoft en una batalla por cómo se veía la papelera en la interfaz gráfica. Todo es, evidentemente, una cuestión de dinero. ¿Podrá la empresa A sacarle dinero a la empresa B por un tecnicismo o por una patente que francamente es ridícula? Parece ser ése el nombre del juego.
Referencias: