Revista Economía
Mientras las autoridades del gobierno y sus allegados se esmeran en convencernos, dado que el PIB creció nuevamente este segundo trimestre del año, que todos están beneficiándose de la actual coyuntura económica. En su mísera cara un pequeño grupo de empleados, del sindicto de trabajadores de la empresa Ripley, acaba de enrostrarle que en este país, con este modelo económico, no todos crecen. (i)Lo que los trabajadores de Ripley, empresa que constituye uno ícono de la transformación económica iniciada desde la década de los noventa en el Perú, reclaman es simplemente el reconocimiento de sus horas extras. Más claro que el agua no puede ser, pues si alguein es contratado para trabajar 8 horas y la empresa desea contar con más horas de servicios laborales debe pagar un adicional. Principio básico del derecho laboral. Acaso, no dicen los defensores de la teoría económica neoclásica (liberal) que todo intercambio se efectúa siempre que sea beneficioso para ambas partes. Olvidan los caballeros del neoclasicismo, que el modelo ocio - ingreso de la oferta laboral, es una burda simplificación del mercado laboral peruano. En este caso, una sociedad, donde la empresa puede usar la coerción, no la amenza del despido, sino el despido mismo, para prevalecer términos de intercambio más adecuados a sus intereses no es con seguridad un intercambio beneficioso para ambas partes.Los trabajadores han denunciado jornadas de 12 a 14 horas, 4 a 6 horas más por la cual han sido contratados. (ii) ¿Y qué dicen nuestras autoridades al respecto?. ¿Y cómo responden los medios de comunicación? Una noticia grave, como ésta, en nuestros medios merece menos espacio que el problema de paternidad de un cómico. No debiera, pues estamos en una violación flagrante de los derechos fundamentales de la persona, en este caso los trabajadores no son tratados como personas sino simplemnte como una mercancía más, tan similar a la esclavitud. Pot otro lado, registrará esta situación el INEI cuando estima los salarios, pues si no lo hace, los trabajadores estarían percibiendo un salario nominal/hora hombre 33% a 43% menos de los registrado estadísticamente. sus estadísticas salariales estarían sobrestimadas.En este país, donde las autoridades del gobierno no son autoridades del Estado Peruano sino serviles hombres del capital transnacional, nadie le sale al frente al gerente de recursos humanos de esta empresa que declara con total desparpajo, quien ahora afirma que están dispuestos a pagar las horas extras luego de verificarlas, lo siguiente: "Sistémicamente tenemos que tener exactamente cuáles corresponden y cuáles no corresponden. Eso hay que verificarlo, tenemos nosotros 13 tiendas, se hace la verificación y luego se pagan las horas extras". Esta empresa que tiene todo un sistema para controlar las ventas a sus clientes hasta el menor centavo, los intereses y la morosidad, quién puede creer que no tenga un sistema que verifique qué trabajadores han laborado horas extras. La verdad, esto sí es como para no creerlo.Pero lo sucedido en Ripley no es un asunto aislado, es una práctica de esta empresa burlar los derechos laborales. Ya anteriormente había sido multada por el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, por un monto de 49329 nuevos soles debido a:- La desnaturalización de contratos a plaza determinado de 210 trabajadores- No acreditar el depósito de la Compensación por Tiempo de Servicio (CTS) de noviembre del 2009. (iii)Esta práctica laboral de parte de las empresas, que no es un problema de nacionalidad del capital, obedece simplemente a una sencilla razón: la flexibilización de la legislación laboral dada durante el gobierno de Fujimori y que ningún gobierno que le sucedió siquiera cuestionó. Esto es lo que Fujimori, además de los delitos por lo que ha sido condenado, le debe a los trabajadores del Perú, el retroceso de sus derechos laborales, donde al trabajador no se le paga sus horas extras, donde el trabajador no es "trabajador" pues brinda "servicios no personales" a la empresa, contratos de locación que no implican derecho laboral alguno, despidos arbitrarios, trabajadores sin seguro, etc. Eso es por lo que Keiko Fujimori debe responder, que lo sepan todos los peruanos, que el gobierno de su padre no sólo fue corrupto sino llevó a los trabajadores a una condición laboral precaria, a una situación de esclavos modernos, donde su condición de persona se ahoga en la lógica de la rentabilidad empresarial.Finalmente, de alcanzar el éxito el sindicato de trabajadores de Ripley en sus reclamos sería la plasmación de una mayor equidad, de una justicia distributiva de la que tantos trabajadores peruanos hoy no poseen. Es una muestra que los sindicatos bien conducidos, centrados en la defensa de sus derechos laborales, pueden conllevar a un Perú mejor. Sólo los defensores del dogma del mercado libre y los fascistas ven en los sindicatos trabas para el desarrollo de un país. Los sindicatos, como lo tuvieron en las sociedades más desarrolladas, tiene un rol importante para alcanzar la equidad distributiva y por ende una mayor eficiencia, las cual son condiciones necesarias para alcanzar el desarrollo económico (que no es lo mismo que crecimiento económico). Definitivamente, esas "buenas noticias" que anuncia la ministra Mercedez Aráoz, no están dirigida a los trabajadores de Ripley. (iv) -------------------(i) La ministra de Economía y Finanzas recientemente ha ceclarado que el PIB creció en este segundo trimestre a una tasa de dos dígitos, revertiendo el resultado negativo del segundo trimestre del 2009. Ver: http://www.andina.com.pe/espanol/Noticia.aspx?id=8XqlEtUMe54(ii) Ver: http://elcomercio.pe/noticia/609574/trabajadores-ripley-acataron-paro-demandaron-pago-horas-extras(iii) Multa que aún no se ha hecho efectiva, pues añun no se agotado el proceso.(iv) Esta situación también pone en evidencia que las centrales sindicales, tanto tiempo maniatadas por partidos políticos han caducado, ya que no son representativas y no canalizan las expectativas de los trabajadores.